Vecinos afectados por el incendio protestan ante Ábalos y la alcaldesa de Gandia

Un grupo de vecinos afectados por el incendio de Llutxent que arrasó 3.270 hectáreas la semana pasada ha protestado ante el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, y a la alcadesa de Gandia, Diana Morant, en su visita al paraje natural de Marxuquera (Gandia).

Solo en la Ciudad Ducal el fuego calcinó casi mil hectáreas, siendo uno de los municipios más afectados por el fuego más fuerte que ha tenido lugar este último año.

Una vez Ábalos ha bajado del coche, un grupo de vecinos han expresado sus protestas tanto con la alcadesa como con el ministro para reclamarles que se declare la zona de emergencia o catastrófica «en cuanto antes». El colectivo ha aprovechado, además, para solicitarles ayudas - cuyo plazo comenzó este lunes una vez el incendio se dio por extinguido- «superiores a los 10.500 euros» y «para todos».

Uno de los lugares más afectados de esta localidad valenciana es el de las urbanizaciones de Montesol y Montepinar, zonas que aun no son habitables y en cuyos chalets algunos ciudadanos han pasado más tiempo del que debían. De ahí las quejas al ministro que se han realizado hoy durante su visita al municipio demandando más ayuda y atención.

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha negado que hubiera descoordinación en el dispositivo de extinción del incendio de Llutxent. Para Puig, «fue un trabajo bien planificado y se consiguió el objetivo principal, que fue que no hubiera ningún tipo de desgracia personal». Ha apuntado que actuaron diversos cuerpos, como bomberos y la UME, y aseguró que la dirección del incendio «fue positiva». El jefe del Consell ha recordado que las condiciones en las se trabajó fueron muy duras: «Hubo momentos de 60 km de fuego por hora, era un lanzallamas enorme», ha asegurado.

Puig ha vinculado las críticas de los bomberos y las denuncias de mala coordinación a los problemas sindicales a los que se enfrenta el colectivo, que ha convocado una huelga para el próximo 7 de septiembre. El presidente echó balones fuera y afirmó que la solución a este problema depende de los Ministerios de Hacienda y Agricultura y que la Generalitat siempre ha mostrado su predisposición al acuerdo. De esta forma, el jefe del Consell ha recalcado que «hay que distinguir los derechos de los trabajadores de la dirección de la lucha contra los incendios, que está haciéndose de una manera profesional, de calidad y con un ejercicio de la responsabilidad enorme«.