Medio centenar de parajes de la Comunitat Valenciana se verán afectados por las limitaciones al senderismo

Pero las restricciones pueden ir mucho mas lejos y afectar a un número más elevado de municipios ya que la normativa de la UE exige que los LICs pasen a ser ZEC en un plazo máximo de seis años. La Comunitat acumula ya años de retraso en este proceso y todavía quedan pendiente de transformación casi medio centenar de parajes. A todos ellos se les podría implementar las nuevas limitaciones planteadas por la conselleria.

Entre los nuevos parajes que pueden sufrir estas restricciones se encuentran áreas emblemáticas de la Comunitat como la Serra Bérnia, el curso medio del río Albaida, el alto del Mijares. Y así hasta más de 40.

Estas áreas protegidas, tanto los LIC como las Zepas (zonas de especial protección de aves), forman parte de la Red Natura 2000. Todos los espacios incluidos en ella tienen que contar con medidas para evitar su degradación. Pero las restricciones que ahora ha planteado la conselleria van más allá de lo fijado por la normativa europea.

La Comunitat cuenta ya con 45 zonas de especial protección, la mayor parte declaradas antes de 2015. En ninguna de las normativas que acompañan estas declaraciones como ZEC se establecen limitaciones como la de declarar «incompatibles» con la preservación del medio actividades como el barranquismo, la escalada o la espeleología.

Es más, en las memorias técnicas preparadas por Emergencia Climática para la tramitación de las ZEC ahora en exposición pública se considera a los distintos deportes y actividades al aire libre como una «amenaza« para estos espacios que al menos hay que evaluar antes de permitir su realización.

El proyecto de la Conselleria de Emergencia Climática ha levantado las protestas de las empresas de turismo activo, guías, montañeros y asociaciones de deportistas. Pero también ha provocado que muchos ayuntamientos hayan mostrado su preocupación por las limitaciones de la nueva normativa.

El impacto de las restricciones puede llegar a ser muy importante en numerosas localidades del interior de la Comunitat que tienen en estas actividades una fuente de ingresos, a veces la única o, incluso, la principal. Ayuntamientos como los de Albatera, Orihuela, Callosa de Segura o Redován han presentado alegaciones.

Sólo en la provincia de Alicante trabajan más de 400 empresas de turismo activo que dan empleo a varios miles de personas. Además, los participantes en estas actividades permiten sobrevivir a un número elevado de negocios de estas localidades, muchas de ellas con un escasos habitantes.

Hay que tener en cuenta que muchos de los municipios afectados son muy pequeños. Es el caso de Biar, Tibi, Alcoleja, Orxeta, Benasau, entre otros.

Las ZEC incluyen un 'plan de usos' en las que se determina, de forma similar a como hace un PRUG en un parque natural, qué actividades se pueden realizar en el espacio protegido y en qué condiciones.

Así, en varias de las localidades afectadas se han aprobado mociones en las que se insta a la conselleria para que cree una mesa de negociación en la que se estudie la situación municipio a municipio, fije las posibles repercusiones que se pueden derivar y determine qué actividades se pueden realizar.

También ha habido municipios, como es el caso de San Vicente del Raspeig, Xixona o Villena, donde se ha aprobado en pleno la elaboración de un informe en el que se estudie la afectación que estas limitaciones van a tener en la población.

La moción ha sido promovida por el Partido Popular y en ella se reclama la creación de la mesa de trabajo para realizar el plan de usos de estas zonas de forma consensuada y atendiendo a las características de cada municipio. También se insta a la redacción de un informe sobre la afección que tendrían sobre el municipio las limitaciones que se quieren imponer desde el Consell.

El ciclismo es otro de los deportes al aire libre que puede verse amenazado por las nuevas restricciones. Así lo aseguró Julio Carrión, delegado de IMBA en la Comununitat Valenciana. Carrión explicó que desde la asociación que agrupa a practicantes de ciclismo de montaña han presentado una serie de sugerencias a la Conselleria de Emergencia Climática para que el sector se encuentre representado en los distintos órganos de participación de cada una de las ZEC.

Carrión señaló que ven con preocupación la propuesta de la Conselleria de Emergencia climática porque las restricciones también pueden afectarles.

Los ciclistas mantienen en estos momentos un frente abierto con el departamento de Mireia Mollà para que se les permita circular por las sendas de los parques naturales. En estos momentos se está multando con más de 600 euros a los deportistas que discurran por estos parajes. Además, denuncian que no se les está permitiendo la participación en los órganos de representación de los parques.

Como protesta, IMBA ha convocado mañana sábado una concentración simbólica de 40 ciclistas de montaña para reivindicar que se nos reconozca el derecho a transitar por las sendas forestales de los Espacios Naturales Protegidos.

Denuncian «el acoso que sufrimos también fuera de estos espacios» y consideran que «todo ello puede suponer el fin del ciclismo de montaña y la pérdida de todas las oportunidades que crecen en torno al mismo, si se mantienen estas políticas».