La Albufera cambia de color

Fuentes de este departamento han indicado que se trata de un fenómeno que no es dañino provocado por una bacteria que se conoce como Thiocacsa.

Según han explicado técnicos de la conselleria, esta zona se encuentra sobre una zona salina de forma que ya es de por sí un lugar salobre. Con la evaporación del verano propiciada por el calor se llega a unas condiciones de salinidad elevadas y extremas y hay pocos organismos que puedan soportar estas condiciones. Uno de ellos es esta bacteria fotosintética que tiene una características que propician este color rosado.

Las mismas fuentes señalan que es un proceso natural que ocurre en el ecosistema igual que el habitual color marrón de las aguas es debido a la presencia de fitoplancton.

En este sentido, han señalado que no es nada dañino ni responde a ningún problema del agua sino que se trata de un paso más en la evolución del ecosistema. En esta línea, los técnicos han señalado que les gustaría intentar explicar a la población los ciclos de agua y aclarar este tipo de fenómenos.

Esta situación se ha producido en el momento en que se está recogiendo el arroz, uno de los momentos más delicados del año. Es ahora cuando se corre el riesgo de que se provoque el fenómeno de aguas negras que puede provocar la muerte de los peces por la falta de oxígeno en el agua.

Esta situación se produce cuando no se recoge la paja del arroz (los restos que quedan tras la siega del cereal). Es entonces, si estos se quedan en los campos, cuando se produce este fenómeno.

En el invierno, con la perellonà que se produce a fines del mes de noviembre, se inundan los campos y si no se ha recogido toda la paja del arroz esta se queda y tiñe las aguas de color negro provocando la anoxia que propicia el fallecimiento de veces como ha ocurrido en varias ocasiones.

Para evitar este problema los agricultores apuestan por la quema de la paja del arroz. Pero esta solución no está avalada por la Unión Europea y los gestores del Botánico diseñaron un plan que reduce las quemas a motivos fitosanitarios. Para ello se debe primar la recogida de los restos de la cosecha.

Los agricultores han aceptado esta solución aunque con desconfianza porque consideran que es muy difícil recoger toda la paja del arroz. Hace unos días el conseller de Agricultura, José Luis Aguirre, mantuvo un encuentro con ellos para buscar una solución definitiva que conjugue los motivos medioambientales con la producción del cereal. Por de pronto, en esta campaña se mantiene el plan ideado por el Botánico a la espera de que los nuevos gestores encuentren una solución más adecuada.