Las aguas fecales rebosan en la zona cero de la dana en Chiva por el embozo de las toallitas

«El lunes pasado tuvimos que arreglar de nuevo la bomba. Un vecino dio parte de la situación, ya que el domingo por la noche colapsó de nuevo la red de tuberías provisionales que hay en la calle Buñol y que recoge todas las aguas fecales de la parte de arriba. En verano, la gente consume más agua y se nota a la hora de evacuar», señala el concejal del Ayuntamiento de Chiva Javi Tarín.

El edil, que es el encargado de la reconstrucción de la zona afectada por la dana, incide en que una de las causas de que el sistema colapse es por el abuso de las toallitas. «La población debe concienciarse de que no se pueden tirar toallitas al váter porque se ha visto que generan unos tapones que derivan en problemas muy graves al embozarse el sistema. No es la primera vez que tenemos que reparar la conducción para solventar este problema», apunta el concejal.

En la calle Buñol, junto al cauce del barranco, hay dos puntos de desagüe provisional a la espera de que se solucione de manera definitiva la red de colectores. Las obras de reconstrucción continúan pero mantienen un ritmo mucho más lento del esperado al inicio de las obras.

Uno de los puntos provisionales de la red de colectores se ubica junto al puente nuevo y el otro, en el puente viejo, en una zona que sigue todavía con una pasarela provisional ya que la conselleria de Infraestructuras no ha iniciado las obras de reconstrucción del puente, algo que en principio está previsto para el 1 de julio después de que se haya visto demorado hasta en dos ocasiones.

Las obras en el conocido como kilómetro cero de la dana siguen su curso en el paseo de San Isidro, donde se han retirado varios accidentes naturales, como la gran roca que generaba un codo junto a la hornacina del santo. En este momento se está levantando un muro de contención con el objetivo de poder reconstruir la calle.

Además, en el mismo cauce se está realizando una losa de hormigón de varios metros de longitud con el fin de reforzar la base del puente nuevo, una obra que ejecuta la Confederación y que pretende completar con otras actuaciones para que en el caso de futuras avenida el agua baje con una menor capacidad de destrucción. En la calle Buñol, las labores de reconstrucción continúan y se alargarán al menos durante todo el verano.