Una playa de Port Saplaya estará cerrada varios días por contaminación
Siguen presentes «niveles elevados de parámetros microbiológicos» y los técnicos volverán a medir el lunes el estado del agua para decidir sobre la reapertura
Los residentes o visitantes de la playa norte de Port Saplaya, en Alboraia, todavía deberán esperar unos días más para volver a disfrutar de este punto del litoral valenciano. Continuará cerrada «unos días más por seguridad», después de que el viernes se detectaran residuos contaminantes que desaconsejaban el acceso de bañistas.
Así lo ha expuesto este sábado el ayuntamiento de la localidad de l'Horta Nord. La medida se justifica en que siguen presentes «los niveles elevados en los parámetros microbiológicos», un problema que el consistorio vincula a las lluvias que el jueves descargaron con fuerza en algunos puntos de la provincia. La previsión es que este lunes se realicen nuevos análisis para conocer nuevamente el estado del agua y decidir entonces si se reabre al público.
⚠ La platja nord de Port Saplaya continuarà tancada uns dies més per seguretat
— Ajuntament d'Alboraia (@ayto_alboraya) July 26, 2025
🦠 Segueixen presents els nivells elevats en els paràmetres microbiològics per la pluja del dijous. El dilluns es tornarà a analitzar pic.twitter.com/fLIUWYoM23
El Ayuntamiento de Alboraia añade una petición: «Continuamos reclamando una solución definitiva a la Conselleria de Medio Ambiente». Entiende el gobierno local que «los vertidos en las acequias que llegan a Alboraia acaban afectando a las playas».
Destaca el consistorio que está trabajando en diferentes soluciones desde el ámbito municipal. Cita, por ejemplo, que ya «aumentamos significativamente los puntos de control». Además, hay un proyecto de desvío de la acequia Mortera a la depuradora y está en el horizonte «la próxima instalación de estaciones de control de vertidos en el polígono industrial». Añaden que el Parc Agrari de Peixets está «a la espera de un permiso de Costas».
Desde el Ayuntamiento creen que los vertidos proceden de las acequias que desembocan en el mar, principalmente las que vienen de aguas arriba, de otros municipios. Es un problema que llevan sufriendo desde hace tiempo. De hecho, el año pasado esta playa estuvo prácticamente cerrada al baño en los principales meses del verano, julio y agosto. También han denunciado el problema a la Confederación Hidrográfica del Júcar, al entender que pueden adoptar medidas para solucionar el problema.
