Puig llama a mantener la unidad ante la financiación gane quien gane en España

Había planteado el Día de la Comunitat como una fecha simbólica. Una jornada que trascendiera la parte festiva, y coronara una semana de actos en los que las puertas de los edificios públicos más señoriales se abrieran de par en par a la ciudadanía por primera vez, aunque la procesión cívica dejase de entrar a la catedral de Valencia, también por vez primera en 20 años. Y ayer, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, debutó en el acto institucional del 9 d'Octubre con un discurso reivindicativo con el que pone el broche final a los ocho días de oro del Consell contra la infrafinanciación. Una semana en la que Les Corts aprobó por unanimidad una propuesta del Consell para reclamar la llegada de más fondos con el nuevo modelo, y en la que todos los grupos políticos, empresarios y sociedad civil suscribieron en un acto solemne en el Palau el mismo compromiso contra la actual situación de la Comunitat.

Un Saló de Corts en el que ayer Puig elevó a Madrid las reivindicaciones de su Gobierno, que son ahora las de toda la sociedad valenciana. «El tiempo de las falsas ofrendas se ha acabado» dijo el presidente, en un parlamento pronunciado íntegramente en valenciano.

Puig hizo una llamada a mantener la unidad suscitada en torno a la necesidad de una mejora de la financiación y aseguró que «pase lo que pase» en las próximas elecciones generales, la Generalitat será «leal a su palabra». Y es que, «los valencianos no podemos ejercer los mismos derechos que el resto de españoles y españolas como consecuencia de una financiación injusta y discriminatoria, resultado de un modelo desigual, con ciudadanos de primera y de segunda según su lugar de residencia», denunció Puig.

«No es determinismo histórico que condena por siempre jamás a los valencianos», señaló. «No queremos ser más que nadie, pero no aceptamos que se nos trate como si no fuésemos nadie», sentenció durante un instante de su discurso.

El presidente de la Generalitat reconoció que conseguir una mejora de la financiación «no será fácil» porque habrá que romper tópicos y la inercia de muchos años. Pero también porque será necesario una «pedagogía» de la situación, con «sangre fría y coraje» , ya que «sin autonomía financiera no habrá autonomía política», como en tantas ocasiones ya ha repetido el conseller de Hacienda, Vicent Soler.

Para conseguir la ansiada reforma del modelo de financiación, Puig ya advirtió de que será necesario mantener la unidad lograda con todos los grupos, instituciones y sociedad civil. «Hay que hacerla cada día más grande, sumando a nuestro acuerdo a cada uno de los valencianos y valencianas», dijo. Desde la solemnidad que da el acto, el presidente pidió además a los firmantes del acuerdo con la financiación que mantengan su postura gane quien gane las próximas elecciones generales. «Pase lo que pase, este Consell será leal en su palabra» porque la viabilidad de la Comunitat no se reduce a una mera cuestión económica que deben decidir otros.

El jefe del Consell recordó que la región está en un punto en el que toca volver a reivindicar «los mejores valores de los valencianos». «La Comunitat superará todos los acontecimientos si se recupera el espíritu del deporte, se recupera la cultura del trabajo y cada uno aporta su talento al bien común». «Es necesario que de Vinaròs a Pilar de la Horadada, desde la plana de Requena-Utiel hasta l'Horta, desde el Rincón de Ademúz al Cabo de la Nao se escuche una voz clara que, por encima de partidismos y localismos, cante una partitura de exigencia, corresponsabilidad y cohesión», reivindicó.

Exceso de reivindicación

Las reacciones al discurso del presidente de la Generalitat no se hicieron esperar. La presidenta del PPCV y portavoz del grupo parlamentario popular, Isabel Bonig, criticó que Puig centrara su alocución en la «reivindicación» y no en «asumir responsabilidades». «Como dijo Julio César no es el número, sino la visión la que gana batallas», sentenció a su salida del acto. Por su parte, el portavoz de Compromís en Les Corts Valencianes, Fran Ferri, calificó el discurso de «muy positivo» porque, según destacó, «ataca el problema real de los valencianos ahora mismo».

La portavoz de Ciudadanos en Les Corts, Carolina Punset, tildó el texto de «razonable» pero reconoció que espera que el jefe del Consell «se salga del marco de la queja permanente por falta de financiación, que no puede ser el monotema del Gobierno valenciano». Sin embargo, para el líder de Podemos en la Comunitat, la intervención del presidente Puig fue «comprometida y valiente» y consideró que el jefe del Consell había estado «a la altura de las expectativas». Manolo Mata, síndic del PSPV en Les Corts, se felicitó de que el acto institucional hubiera sido «toda una declaración de principios». «Se ha hecho justicia con las distinciones», afirmó.