Vecinos de Alcoi intentan parar una obra pública para evitar que un sobrecoste repercuta en ellos

Los vecinos del barrio de Els Clots en Alcoi han intentado este viernes paralizar las obras de renovación de su alcantarillado público. Todo se debe al sobrecoste que la empresa quiere hacer repercutir en ellos, derivado de la instalación de la acometida de agua en cada una de sus casas. Se trata este del elemento que conecta cada vivienda a la red pública de tuberías.

Hasta 850 euros le solicita la adjudicataria a cada vecino por una actuación, que si bien no forma parte de las obligaciones contractuales de la empresa, inicialmente se había cifrado en unos 100 euros.

Los trabajos afectan a la calle Rogelio Sanchis, en la cual los vecinos han protagonizado esta mañana de viernes un plante con tal de paralizar las obras. A pesar de su acción, los trabajos han continuado su curso. El presidente de la asociación de vecinos del barrio, Eugenio Villahermosa, asegura que muchos de los vecinos no pueden asumir ese gasto. “Aquí viven pensionistas que no pueden permitirse ese pago. Nos lo han pedido esta misma semana, y a pagar la mitad en seguida”.

Los vecinos tienen prevista una reunión el próximo martes con el concejal de Obras y Servicios, Jordi Martínez, con tal de llegar a una solución. En ese sentido, Martínez reconoce que el precio que ofrece la empresa “no es razonable”, por lo que desde el ayuntamiento se intentará llegar a un acuerdo con la adjudicataria para que rebaje el coste.

El concejal también ha reconocido que la instalación de las nuevas acometidas no figuraba en el contrato de obra. "La idea era que durante el transcurso de las obras, cada vecino pudiera arreglarse de manera particular sus pluviales para conectarse a la red pública". Sin embargo, tal como asegura el propio Martínez, la adjudicataria se habría negado a que cualquier otra empresa participara en la obra, por lo que se ofreció a renovar ella misma las acometidas. El problema ha surgido a la hora valorar económicamente esa actuación, que de los 100 euros iniciales, y según los vecinos, ha pasado a más de 800.

El presidente de la asociación vecinal reconoce que la empresa no les obliga a cambiar las acometidas, pero sí que les advierte que, en caso de no hacerlo, y una vez finalizadas las obras, la reparación podría ascender hasta los 5.000 euros.

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