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La exalcaldesa, en su comparecencia pública para explicar el blanqueo. :: txema rodríguez
La fiscalía no ve delito en los gastos de alcaldía de Barberá

La fiscalía no ve delito en los gastos de alcaldía de Barberá

El ministerio público no aprecia malversación porque los regalos se hicieron y los viajes tienen una explicación

A. RALLO

Miércoles, 13 de julio 2016, 00:02

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valencia. La Fiscalía del Supremo ha archivado la investigación abierta a la exalcaldesa de Valencia Rita Barberá por los gastos de representación durante su última legislatura al frente del Ayuntamiento de Valencia. No ve delito en los regalos de cajas de naranjas a líderes del PP durante las Navidades y tampoco en los viajes y gastos en restaurantes de la primera edil. Todos los desplazamientos están justificados y en aquellos que no, al ser el destino Madrid y de un día de duración es «deducible» su carácter oficial.

El caso, que nunca pasó de esta fase prejudicial, arrancó a raíz de una denuncia de Compromís en plena campaña electoral de las municipales de 2015. El Ministerio Público abrió las correspondientes diligencias de investigación penal y encargó una serie de informes. Durante todo el periodo, el alcalde Joan Ribó ha utilizado recurrentemente el asunto para atacar a la formación popular y tratar de obtener un rédito electoral.

La última de las diligencias de la fiscalía fue citar como investigada a la jefa de gabinete de la exalcaldesa, Asunción Barberá. No suele ser frecuente la declaración como investigados en esta fase del procedimiento. La mujer, hermana de la alcaldesa, compareció acompañada por su abogado. Su declaración fue breve. Optó por no contestar al fiscal y tan sólo respondió a las cuestiones de su letrado. Las preguntas se centraron en su papel en el Consistorio y el trámite administrativo que seguían las facturas.

Tras esta comparecencia, el instructor de Valencia llegó a una conclusión: existían indicios de un delito continuado de malversación por parte de Barberá. Y sostenía que su hermana era la cooperadora. No obstante, el ser la dirigente aforada, la Fiscalía de Valencia no podía interponer una querella. De tal forma que la fiscal jefa se inhibió a sus compañeros del Tribunal Supremo quienes ahora han decidido cerrar el caso al no apreciar indicios de una actuación delictiva, tal y como ayer adelantó El Mundo.

La respuesta del Supremo ha dejado en evidencia la postura que se mantenía en Valencia respecto a los regalos y los gastos de viajes y manutención. Recoge el dictamen emitido en Madrid que el criterio del Supremo para que se produzca la malversación «es una disposición de fondos públicos y una ausencia de acreditación del destino público dado a ellos». No ocurrió esto con las cajas de naranjas, enviadas a 86 personas «con relevancia pública o social», según el informe que en su día elaboró la UDEF. El informe de la Intervención General, no obstante, recoge que no existía un criterio objetivo de reparto de estos presentes y tampoco el interés público o la vinculación de estas personas con Valencia.

Argumenta la Fiscalía que tampoco existía una definición -hasta 2016 no se ha incluido- de en qué consistían los gastos de representación. Así, concluye que el regalo se hizo por Navidad, era un producto típico de Valencia y su importe no era elevado. El total son 32.000 euros pero repartidos en cuatro años y en más de 80 destinatarios.

La mayoría de los beneficiados eran del PP, partido que estaba en el Gobierno. «No resulta apreciable que los regalos formaran parte del ámbito personal o familiar de la alcaldesa», descarta el documento de los investigadores. De igual modo, rechaza cualquier imputación delictiva para su hermana. Es cierto que ella visaba las facturas, pero posteriormente se remitían al órgano fiscalizador y no consta que este pusiera reparos.

El otro apartado: los viajes

La intervención acreditó en su día que no existía justificación en unos 25 viajes. Sí se sabe el motivo, pero se duda de que tenga relación con su labor como alcaldesa. El dictamen resuelve que todos los desplazamientos «tienen una explicación, aunque sea somera». En otros, en los que se ignora el motivo, «breves y con acompañamiento de escolta», es «deducible» que se trataba de desplazamientos de carácter oficial. En ambos apartados, regalos y viajes, sí se aprecian deficiencias de justificación deben resolverse en el ámbito administrativo, apunta la Fiscalía.

La decisión de la Fiscalía supone otro balón de oxígeno para la exalcaldesa de Valencia y actual senadora. La semana pasada ya recibía otra buena noticia desde el Tribunal Supremo, que archivó la investigación por la no retirada de los símbolos franquistas. Ahora, la exalcaldesa sólo está pendiente de una resolución: si el Supremo decidirá finalmente investigarla por el delito de blanqueo en el Ayuntamiento de Valencia.

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