«El desconcierto era total y muchos compañeros se fueron a casa asustados»
Los rumores corrieron durante más de dos horas entre los estudiantes, que no podían entrar en clase para recoger sus cosas
E. G. F./E. B.
Viernes, 9 de octubre 2015, 00:31
Unos se tomaban el desalojo con más humor que otros, pero conforme pasaba el tiempo los estudiantes se impacientaban y preguntaban a los agentes que custodiaban las puertas de acceso.
«Han cortado el wifi de la universidad», comentaba David, que se enteró del aviso cuando estaba en el baño y vio salir «en tromba» a compañeros. Poco antes de la once de la mañana a muchos les pilló en un descanso de las clases. Este era el caso de David y sus amigos Damián, Paula, José Antonio y Alberto, estudiantes de 4º de Derecho. «El desconcierto es total y muchos se han ido a casa asustados», explicaban. Vieron entrar a la Policía, pero les dijeron que era un simulacro. Después escucharon que era una bomba «pequeña». «Nadie sabía lo que pasaba, parece que el paquete ha llegado a una vicerrectora y contenía un líquido del que salía humo». Este era uno de los comentarios que circulaban entre los alumnos. Después, que no era humo, pero sí un gas y hasta se llegó a dar por hecho que había sido desalojada a Facultad de Filosofía y Letras y un aulario. «¿En la Audiencia Nacional también dicen que hay un aviso?», preguntaban.
A Miguel y Dani, de 2º de Derecho, les había llegado el rumor de dos detenidos. Otro de los bulos. El primero estaba en clase y una compañera entró y dijo que había un aviso de bomba. «No la creímos», explicaba, hasta que una segunda compañera les puso en alerta. «Llegó la policía secreta y el profesor nos dijo que saliéramos al patio. Estaba la furgoneta de los Tedax». Dani y sus compañeros fueron desalojados de su clase, situada en la primera planta, por agentes de la policía. «Lo hicieron con mucha tranquilidad, pero también para que fuéramos un poco ligeros».