Orriols vuelve a la calle: «Seguimos en lucha»

Centenares de personas recorren ya las calles del barrio tras una pancarta que lleva por lema «Con delincuencia no hay convivencia». A las pancartas les seguía una gran marea de gente que ayudados de una batucada tenían claro su propósito: hacer ruido. «No queremos cambiar de barrio queremos que el barrio cambie», ha gritado uno de los residentes que encabezaba la manifestación que recorre las calles esta tarde.

A la manifestación han acudido en apoyo muchos vecinos que se confiesan «hartos» de una situación que ha llegado al límite. «No es normal sentir miedo a salir a la calle, al menos no era lo habitual hasta ahora por aquí, y no es sólo por la noche es a cualquier hora del día», ha confesado Sara una joven que mostraba su repulsa a la delincuencia después de que a una chica como ella le atracaran esta misma semana.

«Ribó escucha Orriols está en lucha», «Con delincuencia no hay convivencia», «Viva el barrio de Orriols», así se han sucedido algunas de las consignas en repulsa de lo sucedido en los últimos meses.

«Aquí no nos manifestamos contra nadie ni por su raza ni por su por su religión, es un barrio acogedor pero no aceptamos la delincuencia venga de donde venga», expresaba uno de los portavoces de las asociaciones vecinales.

La manifestación también ha pasado por la zona cero, las calles de San Juan de la Penya y la calle Pere Viñas, y en el cruce más de seis agentes de la Policía Nacional armaban un pasillo por el que ha pasado la marea de gente. Precisamente ha sido en este cruce en el que han ocurrido las últimas reyertas y ahí mismo es donde los vecinos han gritado: «No vamos a consentir que por estas calles no pueda caminar seguras nuestras familias, nuestros vecinos».

Y es que la reunión de los representantes vecinales con Ribó no consiguió desactivar la protesta de una barrio que clama por recuperar un pedazo de normalidad. «Estamos al límite», han advertido desde la entidad vecinal.

Con las ocupaciones ilegales de pisos convertidos ahora en narcopisos y las multitudinarias peleas, como la que terminó con nueve jóvenes detenidos y tres heridos en la esquina de las calles Padre Viñas y San Juan de la Peña, el barrio estalla. Y lo hace en esta tercera protesta desde que empezó el año.

Las dos horas y media de reunión con el primer edil no calmaron este martes las aguas. Ribó se comprometió a «dedicar una parte significativa de los 57 nuevos agentes que van a incorporarse a la Policía Local al barrio de Orriols». Sin embargo, descartó ante los vecinos poner un retén porque lo consideró poco eficaz y añadió que se precisaría presupuesto y un local con unos requisitos.

En el área de Educación, apuntó que se va a trabajar con los chicos en edad escolar que «inasisten a las clases». Y en Servicios Sociales, habrá más dotación de personal, no sólo para tramitar ayudas, sino también para intervenir y hacer un estudio de las familias y hacer un seguimiento, algo en lo que venían insistiendo los residentes.

Este martes mismo durante la reunión el concejal de Protección Ciudadana, Aarón Cano, informó a los vecinos que en ese momento se había producido una detención y que habían incautado droga.