Ribó sólo logra ejecutar el 2,8% de las obras del año en el primer trimestre

Este 2,8% supone siete millones de euros en obligaciones reconocidas, es decir, certificaciones de obras aprobadas por las concejalías. El total tras la modificación al incluir el sobrante de 2021 se eleva a 249 millones de euros.

Los datos fueron contrapuestos enseguida con la recaudación en tasas e impuestos por el grupo popular, al insistir en que hay margen para una bajada de tributos. En el último pleno pidieron una reducción en 62 millones de euros, lo que fue rechazado por el gobierno municipal. En el primer trimestre, los ingresos se han elevado hasta los 16,7 millones.

Catalá destacó los 9,5 millones en tasas, donde se incluye 3,8 millones por la tasa de alcantarillado o los 2,7 por el estacionamiento de vehículos. «Demuestran un año más que el gobierno de Compromís y PSPV está agotado y su gestión es cada vez más ineficaz. Es necesario ya un cambio en el Ayuntamiento para que las inversiones lleguen a los barrios, pues no se puede tener los mayores presupuestos de la historia si son incapaces de ejecutarlos».

La edil recordó que el pasado año ua se cerró con uno de los niveles de ejecución más bajos de la historia en el Ayuntamiento. «El gobierno municipal dejó de invertir en los barrios más de 152 millones de un total de 224 previstos», apuntó. Sin embargo, ocurrió lo contrario con la recaudación de impuestos y tasas más alta de historia, que llegó a 451 millones, más que el año anterior.

El portavoz de Ciudadanos en el Consistorio, Fernando Giner, también cargó contra el bajo nivel de inversiones acabadas. «Demuestran que no son una prioridad para el gobierno de Ribó», al considerar que la proyección de gastar 250 millones en 2022 «es totalmente irreal. Algo que ya queda suficientemente demostrado con la baja ejecución que se ha producido hasta ahora, con tal solo siete ejecutados».

Además, Giner también ha lamentado que en el primer trimestre de 2022 ya se han realizado diversas modificaciones de crédito para seguir hinchando esta partida, hasta llegar a los 250. «Es evidente que Ribó no va a ser capaz de ejecutar todo ese dinero, por lo que consideramos un desperdicio que lo tenga parado en las arcas municipales cuando donde debería estar es en el bolsillo de los valencianos, especialmente en un momento de crisis».

Así, ha vuelto a insistir en una bajada de los impuestos: «No entiendo el afán recaudatorio de este Ayuntamiento, si luego una gran parte del dinero se queda sin invertir», ha declarado. En este sentido, Giner ha valorado que la diferencia entre lo presupuesto y finalmente ejecutado «demuestra la mala gestión económica de este gobierno, que no es capaz de realizar previsiones realistas en cuanto a capacidad de recaudación y gasto».

«Otra prueba de ello es el impuesto de las plusvalías. Nosotros ya avisamos de que la modificación del método de cálculo por el recurso de inconstitucionalidad iba a afectar gravemente a la recaudación, y que incluso se podría dar un salgo negativo. Sin embargo, el área de Hacienda pronosticó unos ingresos de 35 millones de euros para 2022 por este concepto. Pues bien, ya tenemos la primera confirmación de que Ciudadanos estaba en lo cierto: en marzo, el Ayuntamiento tiene un saldo negativo por plusvalías de 1,3 millones de euros», ha explicado Giner.

«Es decir, no solo no ha recaudado nada sino que además ha tenido que devolver más de un millón de euros por la avalancha de recursos que han presentado los vecinos afectados», ha lamentado. «Las consecuencias de estas malas previsiones las pagan siempre los valencianos, que tienen que abonar sus impuestos para que además luego el Ayuntamiento no sea capaz de devolvérselo en inversiones positivas para la ciudad».