Así es el inédito protocolo tras la muerte de Benedicto XVI

La muerte del papa emérito Benedicto XVI supone un hecho insólito para la Iglesia en más de 600 años. Joseph Ratzinger es el primer pontífice desde 1415 (Gregorio XII) que no muere en el cargo fruto de esa histórica renuncia allá por 2013. Este hecho, además, allana el camino a sus sucesores para que también puedan dar el paso en futuras fechas.

Así, los protocolos tras su muerte no serán como los de sus predecesores por la falta de unas normas sobre cómo organizar los actos tras el fallecimiento de un emérito al no existir un estatuto sobre esta figura.

La novedad principal del fallecimiento de Benedicto XVI es que no desencadena un proceso político, es decir, un cónclave para elegir a un nuevo Papa.

Funeral a partir del jueves

Las exequias tendrá lugar a partir del jueves 5 de enero a las 9.30 horas, en un acto celebrado en la plaza de San Pedro que estará presidido por el actual papa Francisco. Será la primera vez en la historia contemporánea de la Iglesia en la que un obispo de Roma presida el funeral de su predecesor.

Aunque Ratzinger había puesto fin a su pontificado de manera voluntaria hace ya cerca de diez años, se espera que su funeral reúna a un buen número de jefes de Estado y de Gobierno.

La Constitución 'Universi Dominici Gregis', aprobada por Juan Pablo II en 1996, marca los pasos a seguir tras la muerte de un Papa, pero como no es un caso tradicional, no se producirá la apertura de un cónclave ni la destrucción del anillo papal, ya efectuada en 2013.

Al final de la celebración eucarística del jueves, tendrá lugar la Ultima Commendatio y la Valedictio. El biógrafo oficial de Benedicto XVI reveló en 2020 que quería ser enterrado en la tumba de Juan Pablo II, de quien fue estrecho colaborador, en la cripta de San Pedro.

Será enterrado sin vestir el palio, que se colocará en el ataúd como se hace para los obispos eméritos. En las primeras imágenes del difunto Benedicto XVI se le ve yacente en una sala del monasterio, acostado sobre dos cojines, vistiendo los paramentos pontificales: la sotana blanca y la casulla roja, en sus manos tiene un rosario y sobre su cabeza la mitra. Al fondo un árbol de Navidad y un Belén.

Capilla Ardiente

La capilla ardiente de Benedicto XVI, en la basílica de San Pedro en el Vaticano, está abierta desde este lunes por la mañana para que los fieles puedan despedirse del pontífice emérito, fallecido el sábado a los 95 años.

Las puertas de la inmensa basílica permanecerán abiertas al público desde las 09H00 (08H00 GMT) hasta 19H00 (18H00 GMT) del lunes.

El martes y el miércoles se podrá acceder desde las 06H00 GMT a las 18H00 GMT.

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