«Estamos en la calle y no tenemos donde dormir»: el drama de los erasmus españoles en Italia

«Estamos en la calle y no tenemos donde dormir». Es el drama que están viviendo decenas de estudiantes españoles Erasmus en Italia. Sin piso y con la angustia de tener que adaptarse a unos números imposibles. Algunos han dormido en la estación de tren y los pocos que han encontrado un lugar donde vivir están acogiendo a los que no tienen aún casa para evitar que se queden a la intemperie.

El desfile de maletas por las calles de Ferrara continúa día tras día, porque la situación no mejora. En una habitación duermen cinco personas en camas y otra en un sofá, pero aún van a entrar dos más.

El calvario se extiende a otras ciudades de Italia. José está de Erasmus en Roma y las maletas después de varias semanas siguen sin deshacerse. «He estado en 50 o 60 inmobiliarias y no hay absolutamente nada». No hay pisos para alquilar o los precios son desorbitados, y las colas en las universidades de destino para pedir ayuda se multiplican. Los alumnos incluso duermen en la cola para conseguir ser atendidos al día siguientes.

Sergio, preocupado, está a punto de volar desde Orense a Catania. «Los gastos de vivir fuera son mucho mayores que el importe de la beca», reconocen responsables universitarios. Y así, las becas Erasmus, orgullo y bandera de la unión europea, se encuentran en algunos destinos amenazadas por el problema de la vivienda, con precios inalcanzables, estafas o hasta infraviviendas. «Lo que se supone que se tiene que vivir con ilusión lo estamos sufriendo como un auténtico calvario», resume una afectada.

Una situación que ha obligado a algunos a replantearse su futuro inmediato. Y eso que el programa erasmus lleva 30 años y más de 10 millones de alumnos europeos que ya han obtenido su inolvidable beca.

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