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Diario de un paseante

Siglo XXI, cambalache

Jorge Alacid

Valencia

Miércoles, 23 de julio 2025, 23:45

Detenido en un semáforo, me fijo en la pared del fondo, al otro lado del paso de cebra (genial sintagma). Un cartel informa de la ... inminente llegada a Valencia del circo, que instalará su carpa... junto al cementerio. Es un chiste muy valenciano, propio de un particular sentido del humor que desafía la lógica, bastante contagioso. La misma pauta gamberra que se observa un poco más allá, en la misma entrada del camposanto, espacio por cierto de recomendable visita: lo primero que ven nuestros ojos es otro cartel, que anuncia la cafetería dispuesta junto a su puerta. Como alojar un bar en el cementerio es una muy brillante idea que celebraría Berlanga, unos mustios clientes le rinden tributo de tertulia en su terraza, insensibles al absurdo de atacar el cafelito entre crisantemos y nichos. Entre héroes y tumbas. Pero la imagen tiene sentido: sirve para ilustrar la delirante vida que llevamos, donde la anomalía es moneda corriente y lo racional cede ante lo extravagante. Valencia es tal vez el mejor lugar del mundo para aceptar que el siglo XXI es como el anterior un cambalache, según profetizó el inolvidable tango. «Hoy resulta que es lo mismo ser derecho que traidor», cantaba Gardel. «Todo es igual, nada es mejor». Como diría Tony Soprano, amén a todo.

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La inmortal letra me acompaña durante el paseo. Y concluyo que, en efecto, el mundo fue y será una porquería, mientras tarareo en voz queda. No ignoro que cualquiera es un señor y que cualquiera es un ladrón, conforme avanzo hacia el estribillo. O un truhán, añado para mí, convaleciente de la grata lectura del libro de Ignacio Peyró sobre Julio Iglesias. «El que no llora, no mama; y el que no afana, es un gil»: tantas patologías contemporáneas, encapsuladas en una rima con 90 años en su ADN. No hemos inventado nada: nuestra contribución más contemporánea es tomarnos a risa las calamidades de toda la vida. Lo que atormentó a nuestros abuelos, hoy es un chiste: el circo junto al cementerio.

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