Fallece el presidente que lanzó el abono de tres años

El Levante se despide de otro expresidente. Si el pasado mes de mayo se produjo la pérdida de Juan José Murria Bau, ahora ha dicho adiós Santiago Sanz Martín. El que fuera dirigente del club azulgrana entre 1977 y 1979 falleció la semana pasada en Valencia. Su paso por la entidad estuvo marcado por el retorno a Segunda División y la búsqueda de soluciones para la preocupante situación económica. En ese contexto, lanzó una campaña de abonos para un plazo de tres temporadas. Una iniciativa que dejó huella.

Santiago Sanz asumió la presencia en un momento delicado, ya que el equipo acababa de descender a la recién creada Segunda División B. Además, los problemas financieros atenazaban a la entidad. Durante la temporada 1977-78, el Levante no consiguió recuperar su sitio en la categoría de plata, pero se resarció en la siguiente campaña. En la 1978-79, el conjunto entrenado por José Antonio Naya impuso su ley y alcanzó el esperado ascenso.

El Levante brilló en el Grupo II de Segunda B con la suma de 55 puntos. El cuadro granota superó en la clasificación al Nàstic de Tarragona y Ceuta para terminar la temporada como líder. Con 80 goles a favor y sólo 20 en contra, los de José Antonio Naya completaron un año rutilante. Con el regreso a Segunda División, Santiago Sanz puso en marcha una memorable acción con el único objetivo de cubrir de cubrir las necesidades económicas. Había urgencias. De esta forma, lanzó la promoción de pases a tres años Pro-Ascenso a Primera para obtener unos ingresos inmediatos y respirar. Una ingeniosa alternativa con tal de recaudar fondos ante las asfixiantes deudas.

Sin embargo, Santiago Sanz presentó su dimisión en noviembre de 1979. «Todos los integrantes del club y de la Fundación nos unimos al dolor de la familia y amigos en estos duros momentos tras su repentina e irreparable pérdida», ha expresado el Levante a través de un comunicado oficial.

Santiago Sanz, quien tomó el testigo de Manuel Grau Torralba como máximo mandatario del Levante, fue sucedido por un Francisco Aznar que pasó a la historia por cerrar el fichaje Johan Cruyff en febrero de 1981. Una pérdida que se une a la de Juan José Murria Bau, producida a principios del pasado mes de mayo. El que fuera presidente del club en 1985 se alzó como uno de los responsables del proyecto del estadio Ciutat de València y posteriormente, evitó que el campo fuera subastado ante los graves problemas económicos.