El suelo agrario sigue al alza en la Comunitat Valenciana por los fondos de inversión y el desarrollo de las renovables

Un dato que consolida la tendencia creciente de los últimos años, con una variación acumulada del 13,8% desde 2020, y una situación a la que no escapa la Comunitat, donde el coste ha aumentado un 8,7% en el periodo 2020-2024 (0,92% en el último año), alcanzado los 19.037 euros tras subir 1.524 euros en cinco años. El ranking lo encabeza Canarias, 148.415 euros por hectárea, debido al alto valor del suelo destinado a plataneras.

Detrás de ese alza continuado de precios del suelo agrario figuran el interés de los fondos de inversión –sobre todo de capital extranjeron, tanto para fincas de recreo familiar como para obtener rentabilidad de una gran explotación agrícola, ganadera o forestal–, el desarrollo de las energías renovables y la creciente profesionalización del mercado con la incorporación de agencias inmobiliarias especializadas en el sector agrario, según señalan distintos informes relativos a este mercado la consultora Gesvalt y la plataforma Cocampo.

Todo ello se traduce en un encarecimiento de su coste y en un incremento de las compraventas de fincas rústicas. En este sentido, los últimos datos publicados por el INE, correspondientes a mayo –que supuso el segundo mejor dato mensual en fincas rústicas, sólo por detrás de marzo–, reflejan que la Comunitat consolidó su liderazgo en número de operaciones impulsadas por el fenómeno de las microfincas y que, junto a Navarra (150%) y Asturias (72,9%), la autonomía (56,9%) lidera el incremento de operaciones.

La Comunitat es, además, una de las dos regiones (la otra es Andalucía) que cuenta con mayor superficie abandonada y sin aprovechamientos. En total, 311.551 hectáreas, según el informe sobre la estructura del suelo rústico de España publicado por Cocampo este año. También recoge que fue la tercera autonomía en mayor número de compraventas de suelo rústico en 2024, con 20.146 adquisiciones, por detrás de Castilla y León y Andalucía, mientras que se situó la cuarta en transmisiones por herencia (17.653).

Por otro lado, la encuesta del ministerio también se detiene en los tipos de cultivo, donde se pude observar cómo el precio medio de la tierra de huerta descendió un 1,8% entre 2023 y 2024 en la Comunitat, pasando de los 31.377 euros por hectárea de 2023 a los 30.798 del año pasado, a pesar del incremento del periodo anterior.

En cambio, el arrozal experimentó un alza del 3,2% hasta situarse de 27.317 euros mientras que los cítricos subieron un 1,2% entre 2023 y 2024. Y una de las caídas de precio más acusada es el viñedo de regadío, un 9%, en contraste con el precio del de secano, que crece un 7,9%.