¿Por qué De Gea fue el único jugador que no aplaudió a Pedro Sánchez?

La imagen ha dado la vuelta al mundo. Pedro Sánchez, en uno de sus primeros actos como presidente del Gobierno, acude a despedir a la selección española antes del Mundial de Rusia, da un breve discurso y los jugadores, situados detrás del político, empiezan a aplaudir. ¿Todos? Justo detrás del líder socialista se ve a un jugador con las manos en los bolsillos, serio, hierático, que se queda de pie sin hacer ningún gesto mientras todas sus compañeros aplauden al presidente del Gobierno.

El futbolista es David de Gea y el motivo por el que no aplaudió a Sánchez se remonta a 2016. Hace dos años el entonces líder del PSOE acusó sin pruebas al internacional de una supuesta participación en un falso caso de abusos, en el que la justicia demostró que el portero no tenía nada que ver y sin concederle la presunción de inocencia.«No me siento cómodo viendo a De Gea de portero de la Selección después de ver su nombre salpicado y denunciado por una menor», afirmó al medio que publicó la información errónea aquellos dias. «Respeto la presunción de inocencia, pero hay que ponerse de parte de la víctima», dijo dejándose llevar por la ola mediática pese a que realmente no existían indicios de delito alguno. De hecho, no hubo ni juicio ni se llamó a declarar a ningún jugador.

Luis Rubiales, presidente de la Federación Española de Fútbol (FEF), desveló ayer públicamente lo sucedido antes del acto. «El lío con De Gea se ha resuelto bien. David de Gea es un chaval fantástico que ya se demostró no tenía nada que ver con este asunto ('Operación Universal') pero muchas veces la publicidad y las malas informaciones juegan malas pasadas incluso para los que quieren hablar con rigor. Ha pedido verle con él antes que con nadie y un poco le ha explicado que estaba contento de que hubiera salido bien de todo aquello y de lo que se ha demostrado. Que en cierto modo entiende que las informaciones no fueron correctas y le ha deseado toda la suerte. Ha sido una charla necesaria y en un tono distendido. Para de Gea obviamente no era la situación más fácil pero lo he visto bastante bien y me ha dicho el presidente: 'Oye si quieres contarlo públicamente cuéntalo'» explicó recociendo que no estuvo delante de la conversación entre Sánchez y De Gea. El presidente, según Rubiales, demostró «humildad» para reconocer su error «y estar cerca de una persona con la que, por las informaciones que recibió que no fueron las mejores» se equivocó, explicó Rubiales confirmando así que Sánchez asumió en privado, no en público, su error.

Y es que las investigaciones, ya casi desde el primer momento y pese al revuelo mediático armado; demostraron que no había delito alguno y que el meta no tuvo nada que ver ni participó de modo alguno con aquel turbio asunto (la testigo había intentado vender a los medios la exclusiva del encuentro sexual con otros futbolistas) que pero no hubo nadie de los que acusaron sin pruebas al internacional, un sin concederle la presunción de inocencia, que saliera a rectificar. Tampoco lo ha hecho, por el momento, el político del PSOE.

Algunos de los compañeros de la selección recordaron después de lo sucedido el error del político, valoraron el temple del portero y creen que el ahora presidente del gobierno debería haber pedido en público disculpas al portero, ya que 'mató' al internacional de la misma manera sin tener pruebas. Curiosamente unos minutos antes de que llegara el nuevo presidente De Gea había reconocido que aquellos días de junio se 2016 fue injustamente tratado a nivel mediático por la prensa que siguió una información errónea. «Creo que ha habido una época en la que no se me ha tratado como se debería. Mucha gente que me ha criticado sabiendo que lo que había dicho no era lo correcto tampoco ha dado la cara y ha rectificado. Yo creo que hay mucha gente que no se merece que haga entrevistas para ellos. Son cosas que pasan y personalmente afectan», dijo recociendo que su familia sufrió mucho por lo sucedido. «Yo soy un chaval tranquilo que es difícil que me afecten cosas, pero hay gente cercana a la que sí le afectan más que a ti. Eso es agua pasada y al final salió que todo era mentira. La gente en la Euro se volvió un poco loca y yo quise darle tranquilidad (salió a dar una primera rueda de prensa desde el primer momento a negar cualquier información). Al final las cosas se demuestran y salió que todo era falso. Es raro que aparezcan cosas así antes de una Eurocopa», lamentó.