Love of Lesbian se moja en el FIB más político: «lo que está sucediendo en Gaza es un genocidio»
La banda española es una de las que sí ha tocado en un festival plagado de cancelaciones, pero ha usado su concierto para clamar contra Israel
El Festival Internacional de Benicàssim (FIB) afronta la recta final de su vigesimo novena edición en sus horas bajas, condicionado por las numerosas cancelaciones a las que ha tenido que hacer frente en las últimas horas, y que han deslucido el cartel de un festival rodeada de polémica edición. Desde el pasado mayo han sido muchos los grupos que se han caído del cartel inicial después de que se hiciera pública la relación del FIB con el fondo de inversión KKR, que mantiene negocios con Israel. Residente, la Mushka, Judeline, La Élite, Califato 3/4, Camellos, Jimena Amarillo o Samantha Hudson han sido los artistas que han cancelado su participación en el festival, que este sábado echa el cierre.
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¿Por qué está en el punto de mira KKR? Porque participa en la promoción inmobiliaria en los territorios ocupados ilegalmente por Israel en Palestina, según denunció 'El Salto'. Y lo hace a través de otro conocido conglomerado, el grupo alemán Axel Springer, del que KKR es principal inversor desde 2019.
Y aunque la banda española 'Love of Lesbian' es una de las que se ha mantenido en cártel, su cantante, Santi Balmes, aprovechó el micrófono de su concierto, el viernes por la noche, para lanzar algunos mensajes velados contra Israel y a favor de la paz en Gaza. «Si un pueblo se cree el elegido de Dios, tiene un problema como pueblo y un problema con su dios», dijo. «Si un pueblo que hace 80 años fue víctima de un genocidio y ahora en el siglo XXI comete otro, tiene un problema de memoria y por el camino ha perdido la humanidad», denunció el cantante de Love of Lesbian. «Porque sí, porque lo que está sucediendo en Gaza es un genocidio o al menos algo muy parecido», dijo, ante el aplauso del público, como se difundió en numerosas cuentas de redes sociales.
«¡Netanyahu, cabrón!», acabó diciendo, en referencia al primer ministro israelí. «Somos músicos y usamos la voz para cantar pero también la debemos usar para denunciar lo inadmisible», dijo.
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