El Hospital Clínico de Valencia cierra tres habitaciones por la presencia de chinches

El Hospital Clínico de Valencia vuelve a ser noticia por la presencia de chinches en sus instalaciones, un molesto insecto de además de provocar picaduras a pacientes y acompañantes supone un riesgo para los enfermos inmunodeprimidos, a los que puede causar un shock anafiláctico.

De nuevo, y como ocurriera el pasado verano, la detección de chinches se ha producido en la cuarta planta del centro hospitalario, donde ha obligado a clausurar, por el momento, tres habitaciones. Al respecto, desde la dirección del hospital explican que «hay tres habitaciones bloqueadas a las que se ya se le aplicado el tratamiento y desinfección que marca el protocolo». En esta cuarta planta se encuentran pacientes de cardiología y con problemas respiratorios, por lo que, especialmente para ellos, supone un riesgo la presencia de chinches.

Otras fuentes señalan que al menos hay una persona afectada por la picadura de estos insectos. Se trata del acompañante de una persona mayor hospitalizada por problemas respiratorios, que sufrió la picadura de las chinches una noche de finales de la pasada semana.

Las mismas fuentes, conocedoras de la situación, señalan que muy probablemente la presencia de estos insectos no se circunscriba únicamente a las tres habitaciones clausuradas, puesto que las chinches pueden moverse entre la ropa o las sábanas, y hasta por los conductos de electricidad, de ahí que podrían encontrarse en otros espacios de esta cuarta planta.

Además del pasado verano, hace tres años, en mayo de 2019, el Hospital Clínico detectó la presencia de estos insectos y tuvo que clausurar habitaciones e impulsar los pertinentes tratamientos insecticidas. En este momento ya había recibido quejas de pacientes por esta situación, mientras que desde la Conselleria de Sanidad se culpaba a los visitantes de ser los causantes de la introducción del insecto en las instalaciones, algo que no sentó nada bien a los afectados. Uno de los enfermos llegó a difundir un vídeo de uno de los insectos deambulando por encima de las sábanas.

Un año antes, en 2018, también se detectó la presencia de chinches después de que un paciente interpusiera una queja por una presunta picadura de una pulga, aunque realidad se trataba del citado insecto.

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