Condenan a un sargento de la Guardia Civil del puesto de Sax por injurias a su excompañera
Un juzgado de Novelda impone una medida de vigilancia al agente por la falta, después de que su expareja lo denunciase por insultarla
Luis Candela
Martes, 7 de abril 2015, 02:17
Un juzgado de Novelda ha condenado por una falta de injurias a un sargento de la Guardia Civil de Sax, de 52 años, por insultar hasta la que hace escasas semanas fue su pareja. La mujer denunció a su excompañero, al que acusaba de haberla insultado después de una discusión tras el divorcio dictaminado a comienzos de este mismo mes de marzo. Según manifestó la denunciante, el agente de la Benemérita le profirió insultos tales como «sinvergüenza», «cerda» y amenazas como «hasta que no acabe contigo no paro», tal y como informaron fuentes cercanas al caso a este diario.
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El agente negó las acusaciones ante sus compañeros de Novelda, pese a que sí reconoció la existencia de una riña telefónica. El asunto pasó por los juzgados del partido judicial competente, ya que la discusión telefónica se produjo porque la mujer pidió explicaciones al sargento por el hecho de que hubiese entrado sin permiso en la casa que compartían, pero cuya titularidad ostenta ahora ella.
El titular del juzgado tomó declaración a las partes, así como obra en la causa el testimonio de los hijos. Según narró la víctima ante el puesto del Instituto Armado que ha instruido el asunto a nivel policial, a mitad de marzo se marchó de viaje y en ese lapso autorizó a uno de sus vástagos a entregarle documentación al hombre. Sin embargo, para su sorpresa, cuando volvió se enteró de que el sargento había accedido a la casa. La mujer añadió que durante su relación de pareja había sufrido otras vejaciones.
El acusado negó haber espetado tales improperios a la que fue su mujer durante 28 años. Admitió haber mantenido la discusión por este asunto, pero que no pasó a mayores, según las fuentes citadas. Pese a ello, se celebró un juicio rápido en los juzgados de Novelda y resultó condenado por una falta de injurias, por lo que deberá estar localizado de forma permanente. La pena le puede acarrear una medida de suspensión temporal en el cuerpo.
El verano pasado, el puesto de Guardia Civil de Torrevieja vivió también varios episodios de malos tratos entre el sargento jefe de la Policía Judicial y su pareja, una guardia del mismo acuartelamiento. En este caso, al agente lo arrestaron acusado de malos tratos. Sin embargo, las denuncias -la mujer llegó a interponer dos- no llegaron a prosperar debido a que la víctima se echó atrás cuando el proceso judicial avanzaba. Según informó entonces la AUGC de Alicante, la mujer decidió retirar las denuncias «por temor».
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