El turismo de cruceros toca techo en Valencia

La época dorada del turismo de los cruceros en Valencia ha sido vista y no vista. Los cerca de medio millón de visitantes que en 2012 llegaron en barco han marcado un límite que no se ha vuelto a alcanzar y no parece fácil acercarse a cifras semejantes.

La evolución que experimentó Valencia durante esos años fue sorprendente. En 2000 apenas hubo 10.000 pasajeros que llegaron a la ciudad en crucero y en unos pocos años, sin una explicación que despierte un claro consenso, Valencia comenzó a moverse en el entorno de los 400.000 cruceristas anuales.

En los momentos de mayor expansión se llegó a hablar de que en 2025 podrían llegar al puerto de Valencia cerca de un millón de visitantes. Las previsiones no se han cumplido ni de lejos. Pero Valencia sigue siendo un destino incluido por las grandes navieras. Aunque es cierto que desde ese mágico momento de 2012, la tendencia ha sido decreciente de forma que en los últimos cuatro años se han perdido cerca del 25% de los visitantes.

Esta pasada semana tuvo lugar la primera reunión del grupo de trabajo para el fomento del turismo de cruceros en el que están representados la Autoridad Portuaria, el Ayuntamiento, la Diputación, la Agencia Valenciana de Turismo, la Asociación Naviera Valenciana, la Cámara de Comercio y la Confederación Empresarial Valenciana. En su seno se pretende estudiar la forma de fomentar este tipo de turismo.

En el marco de este encuentro la Autoridad Portuaria de Valencia destacó la importancia de que la ciudad se convierta en un puerto base y no en una escala más para las principales navieras. Para ello ha adoptado una estrategia muy clara. Por un lado, ha decidido incrementar las bonificaciones a las navieras por atracar en Valencia. En este sentido, aprobó una bonificación del 40% tanto sobre la tasa al pasaje (la máxima legal permitida) como sobre la tasa al buque.

La medida implicará para las navieras, según explicó Aurelio Martínez, presidente de la APV, un ahorro de 600.000 euros al año. Además, el Puerto espera que la licitación de la nueva terminal de cruceros, que va a suponer una inversión de ocho millones, se realice en 2017.

En estos momentos Valencia es puerto base para las navieras MSC y Costa Cruceros, pero además otras 34 compañías utilizan el puerto como base. Las instalaciones disponen en estos momentos de dos muelles que permiten el atraque de buques de hasta 300 metros de eslora. Además, cuenta con otros tres situados en la zona de ampliación norte para las naves que superen estas dimensiones.

Caída de pasajeros

Desde 2012 la pérdida de cruceristas ha sido continua y no parece que se vaya a recuperar en un futuro inmediato. De hecho, en los últimos cuatro años Valencia ha perdido uno de cada cuatro cruceristas. Este año los cálculos más optimistas apuntan a que se puede llegar a 400.000 cruceristas, pero la evolución de los cinco primeros del año invita a mitigar el optimismo.

Desde la Cámara de Comercio de Valencia se señala que uno de los factores que pueden explicar este fenómeno, al igual que el auge producido hace unos años, es la rentabilidad». Los armadores se mueve por dinero y donde pueden obtener una mayor beneficio trasladan sus buques. En este caso es el sudeste asiático es un destino con una gran atractivo en estos momentos», explicaron.

Grandes eventos

Pero no parece que sea la única razón. Hay un hecho innegable y es que los mejores años de la llegada de cruceros comenzaron poco después de la celebración de la Copa América coincidiendo especialmente con la celebración del Gran Premio de Fórmula 1 de Europa entre 2008 y 2012, ambos incluidos

Un informe de la Universitat de Valencia resalta que entre 2004-2013 la llegada de cruceristas se incrementó un 350%, según los datos que recoge proporcionados por el Ministerio de Fomento.

El artículo, elaborado por la profesora Silvia Sanz y por Daniela Zhelyazkova y publicado en el número 56 de 'Papers de Turisme', destaca que el incremento y el cambio sufrido por el turismo que visitaba Valencia, que hasta ese momento era fundamentalmente por ser de negocios, se relaciona directamente con la construcción de atractivos como la Ciudad de las Artes y las Ciencias y el Palacio de Congresos.

A todo ello se une, recalcan las investigadoras, la apuesta de Valencia por los grandes eventos internacionales como la Copa América y la Fórmula 1.

La investigación destaca como elementos que también contribuyeron a cambiar la percepción de la ciudad el incremento del turismo de congresos, las ferias comerciales, el turismo Erasmus, los viajes con líneas low cost y la conectividad de la ciudad, donde la puesta en marcha del AVE en 2010 juega un papel destacado.

Para las autoras, la evolución experimentada por Valencia hacia una ciudad moderna y contemporánea, junto a su rica historia y cultura han hecho posible el crecimiento del turismo de cruceros.

Entre los factores que explican este auge, según el estudio, se encuentran: la promoción turística llevada a cabo Turismo Valencia; la infraestructura portuaria de Valencia, que ha podido ser adaptada al tráfico de cruceros y la celebración de grandes eventos (Fórmula 1 y Copa América, especialmente ) que en su momento atrajeron la atención internacional sobre Valencia de un sector como el de cruceros que hasta ese momento la había pasado por alto.

Entre los factores que también han jugado un papel destacado, resalta el mismo informe, ha sido el desarrollo del aeropuerto y la congestión del tráfico de cruceros en algunos puertos del Mediterráneo como Barcelona, Livorno y Palma.

No hay que olvidar el hecho de la situación internacional en el Mediterráneo oriental que ha facilitado un desplazamiento hacia el área occidental a partir de 2011 y 2012 con el fracaso de la conocida como primavera árabe.

El estudio de la Universidad de Valencia incide que a partir de 2004 se produce un importante incremento debido a la notoriedad que adquiere la ciudad tras ser designada sede de la Copa América. En 2007 se duplica el número de pasajeros por la celebración de este evento. Los incrementos de 2010 y 2011 se imputan a la llegada del AVE y a la promoción turística de la Autoridad Portuaria y de Valencia. A todo ello se unió la evolución de la turística de la ciudad en las dos últimas décadas que logró colocarse entre los mejores destinos turísticos europeos siendo la Ciudad de las Artes uno de los lugares más visitados de España.

El mismo estudio recalca que el 82% de los cruceristas son internacionales mientras que el 91% de embarque-desembarque son españoles. La mayor parte son alemanes (25,9%) e ingleses (25,3%. El tercer puesto está ocupado por los italianos (15%) y los estadounidense (10% del total).

En cuanto a la edad media de los pasajeros de un crucero se sitúa entre la franja de los 35 y 54 años coincidiendo en este aspecto con el perfil general del turista que visita Valencia.

Incrementar las escalas

Desde Turismo Valencia, Antoni Bernabé destaca que la bajada de cruceristas «no es significativo», ya que cada temporada es diferente. En este sentido Bernabé destacó que «este año hemos tenido siete escalas más en el primer semestre, pero han sido barcos de menor tamaño».

Bernabé explicó que en el segundo semestre del año se producirá el fenómeno contrario. «Según las previsiones habrá tres escalas menos, pero con mayor plazas». Explicó para que este periodo las navieras han ofertado más de 24 plazas en comparación con el mismo periodo del año pasado.

En cuanto a la tendencia a la baja que se ha detectado, Antoni Bernabé puntualizó que se trata de un reajuste generalizado a nivel mundial. «Otros destinos como el Norte de Europa, Asia-Pacífico y Caribe han hecho perder posiciones a Valencia».

En cualquier caso, Turismo tiene claro el objetivo: incrementar las escalas con medidas como las tomadas por el Puerto esta pasada semana. Bernabé indicó que están presentes en las principales ferias del mundo, se están reuniendo con las principales navieras, organizando nuevas medidas de promoción.

El presidente del Patronato de Turismo Valencia destacó la apuesta por la ciudad de Viking Cruises que ha aumentado en cinco escalas en la ciudad; el regreso de Roya Caribbean con nueve escalas o la vuelta también de Cunar, propietaria del Queen Victoria y Queen Elizabeth.

Impacto económico

Hay que tener en cuenta que el impacto económico, según Turismo Valencia, es de unos 45 millones de euros, siendo el gasto medio por pasajero en tránsito es de 62 euros y de 80 en el caso de pasajeros de embarque.

Entre los principales atractivos de la ciudad se encuentran la arquitectura y la historia y cultura. La visita a la Ciudad de las Artes es cita obligada para los cruceristas al igual que al centro histórico e ir de compras.

Bernabé defendió que Valencia es cada vez un destino cada vez más conocido como muestran las 400.000 nuevas plazas aéreas internacionales con unos resultados turísticos positivos (12,8%) de incremento.

Como expresaba Luis Martí, presidente de la Federación Hostelera, «nosotros nos hemos creado un problema. En poco tiempo nos vimos cm medio millón de visitantes y mantener ese nivel no es fácil». Pero en ello están.