De Torino a Mestalla requiere a la Generalitat que actúe ya contra Peter Lim

De Torino a Mestalla abre fuego de verdad contra Meriton y lo hace tutelada de alguna manera por el presidente de la Generalitat, Ximo Puig. La plataforma que lidera Juan Martín Queralt va a echar el resto en los próximos días y lo va a hacer con una estrategia jurídica que implica directamente a las propias autoridades políticas valencianas.

No hay oferta de millones encima de la mesa para que Meriton se vaya pero sí un plan de actuación que puede acabar incluso en un futuro en los tribunales. Pese al respaldo implícito que tienen por parte de Ximo Puig, que se reunió este mismo martes con Queralt, De Torino va a apretar las clavijas en una estrategia conjunta con los propios implicados no sólo a la Generalitat sino también al Ayuntamiento e incluso al Protectorado de Fundaciones, que depende directamente también de la Conselleria. Todo está de alguna manera entrelazado.

Dentro de una semana llegarán a su destino tres requerimientos. Uno a la Generalitat, otro al Ayuntamiento y otro al Protectorado. A las dos primeras instituciones se les va a exigir de alguna forma lo que ya se intuía y hasta se había puesto en más de una ocasión como objeto principal: la caducidad de la famosa ATE (15 de mayo) que afecta al nuevo y al viejo Mestalla y, por lo tanto, el incumplimiento por parte del Valencia de los acuerdos que tenía suscritos desde 2015. El club, hay que recordar, ni ha hecho la urbanización de la zona del nuevo Mestalla ni tampoco ha construido el pabellón polideportivo para los vecinos del barrio de Benicalap. Aunque el destino principal son las dos instituciones públicas valencianas, que fueron las que firmaron el acuerdo, lógicamente la segunda lectura es poner contra las cuerdas a Peter Lim, un empresario al que seguramente no le va a hacer nada de gracia que los políticos donde tiene un club de fútbol denuncien su pasividad públicamente. El intento por parte de Anil Murthy de que el mensaje de la crisis general que se vive con motivo de la pandemia no parece haber calado. Y la oposición no quiere que las administraciones se muestren indulgentes al respecto. Sobre todo porque los perjudicados, además de los propios valencianistas, son evidentemente los ciudadanos. Y ahí se podrían pillar los dedos los políticos si cometieran lo que se considera un error por seguir mirando a otro lado cuando el Valencia se sale del camino correcto.

El otro frente que se va a abrir con cierto calado también afecta de lleno a la Generalitat. En concreto, a la Conselleria de Justícia, Interior i Administració Pública que tiene como titular a la consellera Gabriela Bravo. A esta Conselleria se le va a solicitar que examine y fiscalice todas las condiciones por las cuales la Fundación vendió sus acciones en 2014 a Meriton. Es decir, se le recuerda al Protectorado la obligación que tiene de velar por el cumplimiento de dichos acuerdos. Se trata, en definitiva, de sacar a relucir la argumentación por la cual quede al descubierto que muchas de las cuestiones que se recogieron negro sobre blanco en el acuerdo de venta con Meriton han quedado en el cajón del olvido. Más leña para la hoguera.

Con todo esto salieron anoche más que satisfechos los integrantes de la plataforma, que celebraron posiblemente la reunión más importante de los cinco meses que lleva activa esta asociación de colectivos valencianistas. Allí se expuso abiertamente a todos sus miembros la estrategia que tanto a corto como a medio plazo se va a seguir para forzar la salida de Peter Lim del Valencia. y esta vez de verdad.

A la finalización del cónclave, Juan Martín Queralt admitía a los micrófonos de À Punt el trazo más grueso de lo que allí se dijo: «El presidente de la Generalitat yo creo que se ha puesto al frente de la manifestación. Está dispuesto a resolver el problema, hay unas normas jurídicas que se tienen que aplicar. La situación es insostenible».

La relación de Queralt con Puig y la táctica trazada por ambos es más que evidente. El presidente de la plataforma se ha reunido con el jefe del Consell más veces que Murthy para tratar la caducidad de la ATE. Además, Queralt también ha tenido una serie de estrechos contactos con responsables de la Conselleria para estudiar y advertirles también de cómo se podría utilizar al Protectorado para lograr poner contra la pared a Peter Lim.