El Valencia rectifica y mantiene a los mayores de 30 años en la Grada Joven

«El Valencia Club de Fútbol, como medida de gracia con los aficionados ya existentes en la Grada Joven mayores de 30 años, ha tomado la decisión de, durante la temporada 2015-2016, permitir a este colectivo mantenerse dentro de la Grada Joven». Así comenzó ayer el comunicado del Valencia que puso punto y final a la polvareda generada el lunes cuando se desveló que los mayores de 30 años ya no podrían renovar su pase en la Grada Joven en la presente temporada. Una medida que afectaba a casi un tercio del censo actual y que ahora tiene un año de prórroga. Puesto que la postura del club, tal y como confirmó ayer este periódico, sigue siendo limitar a partir del curso 2016-2017 la presencia en la grada de animación a los seguidores que no hayan cumplido la treintena. El dato objetivo de este nuevo roce entre la entidad y el colectivo es que las relaciones entre la directiva de la Curva Nord y la que encabeza Amadeo Salvo como presidente ejecutivo no pasan por su mejor momento. Desde esa base de no entendimiento cada uno puede formular las hipótesis de trabajo que crea conveniente, pero negar la evidencia del enfrentamiento no es la antesala de la solución. Sino todo lo contrario.

El argumentario del club se basa en la restricción de la grada a 1.800 personas y el dato de que ese 27% de personas mayores de 30 años impide el paso de jóvenes aficionados que querrían formar parte del actual pulmón de Mestalla y que no tienen opción. Es por ello que para las nuevas altas sí que se mantiene la limitación de edad, con lo que no se tramitará para la próxima temporada ningún número de pase nuevo a personas que hayan nacido con anterioridad al 31 de agosto de 1984.

La visión en la Curva Nord Mario Alberto Kempes es diametralmente opuesta, ya que consideran que de haberse mantenido la prohibición se hubiera puesto la primera piedra para su disolución. La actual directiva del colectivo, presidida por Fernando León, mantiene que no habría salida para el mantenimiento de la grada de animación de haberse aplicado de inmediato la medida. Los abonados de la Grada Joven de más de 30 años deberán pagar el precio de las zonas análogas al estadio, haciendo la media resultante de los Sectores 8 y 9 Cubierto y Descubierto, 332 euros para los accionistas y 390 euros para los que no lo sean. Una medida que consideran justa los afectados por la medida consultados ayer por esta redacción, al admitir que el poder adquisitivo medio de una persona de más de 30 años permite afrontar esa tarifa. Para los nacidos antes del 31 de agosto del 84 el precio del pase se mantiene en 170 y 200 euros, según se tengan o no acciones del club.

El Valencia salió ayer al paso de las críticas que, en la línea de la actual directiva de la Curva Nord, indicaban que la medida ponía piedras en el camino de la grada de animación: «Esta nueva medida rectifica la anterior publicada por el Club y tiene como objetivo el clarificar que la intención del Valencia Club de Fútbol es, lejos de cuestionarla, reforzar la Grada Joven pero, a la vez, permitir y alentar una rotación de jóvenes aficionados en el estadio y, por encima de otros criterios, mantener un principio de equidad e igualdad con los abonados que no forman parte de la Grada Joven». En lo que el club no quiso entrar es en si la medida restrictiva tenía como objetivo sacar de la grada de animación a los ultras más veteranos. Uno de los asuntos más espinosos desde hace varias décadas en Mestalla y que nadie se atreve a afrontar, ni desde dentro de la propia Grada Joven ni desde las sucesivas directivas del Valencia. Tabú. El punto de vista policial durante todos estos años siempre ha sido el mismo, esperar que sea el propio colectivo o la entidad los que den el primer paso puesto que en un recinto privado como es Mestalla la última palabra con respecto a los socios corresponde a la entidad, que es la que tiene la titularidad del estadio. Con la prórroga, se dará una patada a ese problema simbolizado en un balón hasta el verano de 2016.

Pese a levantar la mano y anular la prohibición de la renovación de los pases en la Curva a los mayores de 30 años, la entidad valencianista dejó ayer claro que a partir de la próxima temporada cualquier valoración de la situación se realizará en función de la propia demanda de aficionados interesados en ingresar en la Grada Joven y de diferentes factores entre los que se encuentran el buen comportamiento en la grada, el respeto a las normas de seguridad y la ausencia de incidentes y/o sanciones tanto dentro como fuera de Mestalla. Un asunto de vital importancia puesto que la lupa de la LFP, en el curso que acaba de terminar, se ha situado en los fondos de los estadios. No hay más que recordar la reciente sanción a la grada de animación del Sevilla.

Los actuales jugadores de la plantilla del Valencia se mantuvieron ayer al margen de la polémica, pese a la petición de comprensión de los actuales miembros de la Grada Joven en redes sociales. Una postura de prudencia que, por otra parte, no parece una mala salida para no acrecentar la división. No fue el caso de Albelda y Cañizares, que expresaron en sus respectivas cuentas de Twitter el apoyo a las reivindicaciones de la actual grada de animación. El más expresivo fue el valenciano: «El Mestalla con la Curva Nord es otro y si el comportamiento ha sido correcto no entiendo ahora esos cambios #YoApoyoCN10». Un mensaje de Albelda que, por cierto, no gustó nada en las oficinas del Valencia.

Los aspectos que el club mantiene invariables, acogiéndose a las normas de seguridad de la actual normativa de la Liga de Fútbol Profesional, es la entrada al campo con huella dactilar y la obligación de activar el pase de forma presencial. Otro foco de enfrentamiento entre la entidad y el punto de vista de la Curva. El Valencia mantiene que para renovar los pases de la Grada Joven los aficionados deberán hacerlo en las taquillas habilitadas al efecto a partir del 15 de junio. Hasta la fecha, era la propia Curva la que tramitaba el pago de los abonos para recoger después de forma conjunta los pases de la temporada y repartirlos entre los socios. Una medida que les permitía cobrar la cuota correspondiente para sus actividades. A partir de ahora, el trámite de renovación será el mismo que para el resto de los socios de Mestalla.