Murthy viaja para reunirse con Lim

Cada vez que Anil Murthy va a Singapur pasan cosas, y no siempre agradables. Al menos últimamente. Lo que podía ser un viaje del presidente a su país por motivos privados y familiares, ahora despierta la expectación y las alarmas en el valencianismo. En las dos últimas visitas del dirigente a Singapur han estallado bombas. En la primera, la de este verano, estuvo a punto de saltar por los aires Mateo Alemany –aunque quedó seriamente tocado– y en la segunda, hace algunas semanas, el que acabó mal fue Marcelino. Fue llegar el presidente a Manises, pasarse por el club y horas después se anunciaba el cambio de entrenador. Ahora, Murthy vuelve a su país en el momento de mayor agitación social que se vive en torno al Valencia.

La afición no acaba de calmarse después de la autoentrevista que protagonizó Murthy en la que trató, como siempre ha procurado el presidente, defender la gestión y la apuesta de Meriton en el Valencia. Peter Lim todavía no ha venido esta temporada en ninguna ocasión a Mestalla para ver a su equipo y lo normal es que tampoco lo haga en próximas fechas, más aún con el clima tan agitado que se vive en la grada.

El máximo accionista del Valencia tiene en esta reunión con Murthy que trasladarle consignas para ver qué rumbo coge la entidad. Con Celades en el banquillo, todavía tiene que decidirse quién es el responsable de diseñar la política deportiva, algo que ya quedó claro este verano que se iba a hacer en mayor medida desde Singapur. Aún así, por operatividad, en el Valencia hace falta alguien que ocupe las funciones que por cargo debería desempeñar todavía –hasta que rescinda– Alemany.

La visita de Murthy a su país no se prolongará durante mucho tiempo porque está previsto que el presidente regrese a tiempo de ir a ver el partido de este sábado en el Wanda con el Atlético. Una incógnita que el club nunca despeja es si en el estadio rojiblanco estará Lim, por aquello de que una vez sí fue al Calderón. Lim quiso vender a Rodrigo al Atlético.