Los vendedores del Mercado Central seguirán al frente de la gestión hasta que se resuelva el concurso público

La asociación de Vendedores del Mercado Central seguirán gestionando el recinto comercial hasta que se resuelva el concurso público que prepara el Ayuntamiento de Valencia. Así lo ha ratificado esta mañana el concejal de Mercados, Carlos Galiana. Es decir que el día 1 de enero no finalizará la autogestión del Mercado Central que se viene realizando desde 1986. Ha aclarado que no es un prórroga del convenio sino que siguen hasta que resuelva la licitación.

A la pregunta de si incluirán en los pliego la petición que realizaron los vendedores al alcalde Joan Ribó de que se priorice la experiencia, Galiana, que ha presentado la campaña de Navidad de los mercados no sedentarios, ha indicado que «una cosa es que la asociación de vendedores no optara al concurso, porque entonces veríamos lo que querían, pero al presentarse al concurso la cosa cambia«.

Según ha indicado, «ni los vendedores ni nadie que se presente puede entrar en los términos del pliego». Ha aclarado que «son los técnicos los que están recopilando información y estudiando el tema«.

El edil ha asegurado que el concurso está en estudio y que no se puede avanzar cuándo será factible la licitación y ha adelantado que la entidad que se quede la gestión se quedará todo el edificio, incluido el sótano del mercado que se cerró tras unas denuncias por el uso del aparcamiento por parte de vendedores. Tampoco se ha concretado si el nuevo gestor será el que cobre las tasas de las paradas, como hasta ahora hace la asociación de vendedores o si lo hará el Cobsistorio.

En el caso del mercado del Cabanyal, Galiana sí ha afirmado que «sera6un proceso rápido porque la gestión la llevará el Ayuntamiento». Y ha explicado que «ahora no tomamos posesión, porque están en plena campaña de Navidad, que es cuando más se vende, pero cuando pasen fiestas ya entraremos«. Y ha indicado que ahora están recopilando información de los horarios y acceso al recinto.

Sobre el mercado de domingos y festivos que se instala fuera del Mercado Central, ha recordado «que los vendedores saben lo que pueden vender y lo que no porque es un mercado extraordinario, que deriva del que se ponía en la plaza Redonda. Al igual que en el rastro tienen claro lo que se puede vender».

Si bien los vendedores del mercado dominical defienden que quieren vender ropa, plantas y regalos, Galiana recuerda «que en la plaza Redonda vendían jaulas, monedas y libros. Además habíamos recibido quejas de los pequeños comerciantes de la zona y de los vendedores del mercadillo del lunes porque los del domingo vendían lo que no toca».