La Semana Santa Marinera se marca el reto de involucrar en la fiesta a los jóvenes y a más mujeres

La Semana Santa Marinera de Valencia, al igual que ha sucedido con las Fallas, ha sufrido una merma importante en el censo, ya que llevan tres años sin salir a la calle, en 2019 porque un fuerte temporal obligó a suspender los festejos y en 2020 y 2021 por las restricciones de la pandemia.

No hay que olvidar que en 2021, tal como publicó LAS PROVINCIAS, la entidad ya perdió 326 cofrades y en la presente edición, a falta de actualizar los datos, ya se conoce que las cofradías tienen dificultades, ya que incluso alguna se ha quedado con la mitad del censo.

Ahora encaran el reto de atraer de nuevo a los cofrades que se habían dado de baja y también buscan nuevos 'nichos de mercado' para aumentar el censo. De hecho, una de las tareas que se han marcado es atraer a los jóvenes y a un número mayor de mujeres.

En la Semana Santa Marinera todas las hermandades y cofradías admiten mujeres, no como en Sagunto que esta misma semana han vetado la participación de las féminas en una de ellas, concretamente en la cofradía de la Purísima Sangre, con 239 votos en contra de admitirlas y 125 a favor. En Valencia pasa justamente al contrario, son conscientes de que es importante hacer una llamada a la participación tanto de gente joven como de más mujeres para volver a subir los asociados.

De hecho, este es uno de los datos que se extrae del primer estudio sobre el futuro de la Semana Santa Marinera realizado por el Ayuntamiento de Valencia y presentado este martes en la sede de la Junta Mayor de este colectivo penitencial.

Y es que, tal como se recoge en este estudio, se han marcado un total de 21 acciones como propuestas estratégicas para el futuro de la Semana Santa Marinera.

Cabe destacar que el Ayuntamiento de Valencia ha impulsado este análisis con el objetivo de fortalecer la celebración. Entre las recomendaciones se encuentra la de favorecer la participación ya citada de la juventud y las mujeres en las actividades, pero también en los órganos de decisión de las cofradías y hermandades.

El concejal de Cultura Festiva, Carlos Galiana, ha destacado «el compromiso institucional con una de las señas de identidad y de las tradiciones más importantes del Grau, el Cabanyal y el Canyamelar».

Después de estar tres años sin poder procesionar por las calles de los Poblados Marítimos, en este informe se hace una reflexión sobre cuál es el camino que debe seguir la fiesta. Este trabajo se ha financiado con fondos EDUSI de la Unión Europea. Se trata de un documento «pionero, que no se ha hecho en ninguna fiesta de la ciudad», según ha señalado el concejal Carlos Galiana. A lo largo de 88 páginas se reflejan las principales dificultades de la Semana Santa Marinera para «tomar nota, mejorar y continuar avanzando».

El informe tiene como punto de partida un diagnóstico de las fortalezas, oportunidades, amenazas y debilidades de la Semana Santa Marinera, que se elaboró en 2021 con la participación de representantes de la comunidad festiva, la juventud cofrade, las entidades vecinales y personas expertas en la festividad. Así, se concluye que «el futuro de la celebración pasa por un cambio generacional y por potenciar la incorporación de las mujeres».

Para conseguirlo, el documento aconseja, entre otras cuestiones, mejorar la comunicación a través de las redes sociales y los soportes digitales; hacer itinerarios QR con historias personales, familiares, fotografías, curiosidades y anécdotas; desarrollar actividades en torno a la fiesta en las escuelas, u organizar propuestas lúdicas, deportivas y culturales durante todo el año.

En esta línea de trabajo, señala el texto, se deben implicar todos los agentes relacionados con la fiesta, como las entidades festivas, las juntas parroquiales, representantes de la iglesia de los barrios festivos, la Junta Mayor de la Semana Santa Marinera o el mismo Ayuntamiento.

El estudio plantea asimismo la creación de un centro de documentación, investigación e interpretación de la Semana Santa Marinera y Mediterránea, con una biblioteca física y virtual y con personal profesional experto.

Se propone celebrar un 'Mig any fester', potenciar la interacción entre las entidades de las diferentes parroquias o unificar entidades festeras. Incluso se recoge la idea de hacer una preparación académica de los jóvenes cofrades.

También se cita la necesidad de revitalizar los barrios y ven como una amenaza los pisos turísticos y el riesgo de gentrificación.

De igual modo se refleja que hay cierta 'competición' por conseguir recursos entre las fallas y las cofradías.

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