La OCU pide sanciones más duras por no recoger los excrementos de perro de las playas de Valencia

La presencia de excrementos en la vía pública ha sido el principal motivo de queja de muchos ciudadanos valencianos. Se trata del residuo que más ensucia, las heces sin recoger suponen un foco de infecciones para toda la población y en especial para los niños. Por ello, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) exige al Ayuntamiento acciones de concienciación, la habilitación de zonas para perros en las playas, así como que se endurezca la vigilancia y las sanciones a los dueños por la falta de su recogida.

Ahora, con la llegada del verano, el problema se traslada también a las zonas costeras de Valencia, donde supone un gran problema, no solo desde un punto de vista higiénico y de salud pública, sino también, de civismo y económico ya que puede impactar gravemente en el turismo de esta localidad.

Un estudio realizado por la OCU sobre limpieza urbana realizado en 2019 refleja que los excrementos abandonados en la vía pública fueron el primer elemento de suciedad en la ciudad. Para cambiar esta situación la OCU se ha dirigido en esta ocasión al Ayuntamiento de Valencia, para reivindicar mayor vigilancia y sanciones más férreas para las personas que tienen perro y no recogen sus excrementos de la vía pública.

Por otra parte, OCU pide a los dueños la responsabilidad que les corresponde, mostrar un comportamiento cívico con gestos como llevar sus propias bolsas para recoger las heces de sus mascotas y acudir a lugares habilitados para ellos en las playas para mantener el espacio de ocio lo más limpio posible.

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