Ahora sí, adiós al circuito: 3.200 pisos y un gran parque en el PAI del Grao

En esto de saldar deudas históricas, es importante cuándo. También el cómo. En el PAI del Grao, el retraso es considerable, pero el proyecto presentado por fin por la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, plantea un barrio a la altura de la fachada marítima de la ciudad, siempre repensada pero nunca ejectuada, que va sobre los restos del naufragio de la Fórmula 1. El proyecto, que costará 156 millones que pagarán los promotores, plantea un nuevo barrio sobre las prolongaciones de la Alameda y la avenida de Francia con más de 3.200 viviendas, 160.000 metros cuadrados de zonas verdes y grandes suelos dotacionales, así como una torre de 42 plantas que se convertirá en un 'hub' tecnológico inédito en Valencia. Deuda saldada, por tanto, de la ciudad con su mar.

«El PAI del Grau es uno de los proyectos más emblemáticos que tiene pendiente Valencia, que representa compromisos muy importantes para el futuro de la ciudad porque no es sólo urbanismo, es modelo de ciudad, y por fin hoy da el pistoletazo de salida para que las valencianas y los valencianos veamos un sueño hecho realidad», destacó ayer la alcaldesa Catalá, que ayer se reunió con el concejal de Urbanismo, Juan Giner; y el concejal de Movilidad, Jesús Carbonell; y con los técnicos responsables el proyecto: el arquitecto José María Tomás y Agustín Pérez.

En lo referente a las viviendas, los 3.204 nuevos pisos se harán en edificios con una altura máxima de entre 20 y 40 plantas. De esas 3.200 viviendas, 2.420 son libres, 534 de protección pública (VPP) y 250 de residencial dotacional. A esas 500 VPP se añaden 300 más que aporta el Consistorio. La previsión es que las obras comiencen en 24 ó 25 meses, según datos de Giner, que insistió en que los plazos son prolongados en este tipo de intervenciones.

En este sentido, la alcaldesa calificó la intervención de «sostenibilidad, motor económico e innovación» porque según explicó «contempla 160.000 metros cuadrados de zonas verdes e integra, definitivamente, el Jardín del Turia con su tramo final hasta la desembocadura; porque permitirá disponer de más de 3 kilómetros de carril bici a través de calles arboladas con más de 430 alcorques; un drenaje que recogerá el agua de lluvia en las zonas verdes; y una movilidad más amable y de proximidad al reducir el número de carriles de tráfico rodado en las prolongaciones de la Alameda y la avenida de Francia». Estos parques incluirán vegetación autóctona y fuentes en la zona más cercana al puerto para recrear un delta. La conexión con Moreras y Nazaret se hará con un nuevo puente que cruzará entre el actual Cuc de Llum, que se rehabilitará, y el de Astilleros, así como a través del Jardín del Turia. Para salvar las vías de Serrería se construirá otro puente en la avenida de Francia. Se crearán nuevos viales dentro del PAI, aunque Giner insistió en que el proyecto intenta aprovechar «todo lo posible del viejo circuito», tanto en iluminación como en viales, por ejemplo.

Además, el PAI dispondrá de 95.000 metros cuadrados de suelo terciario, lo que multiplica las opciones de crecimiento del hub tecnológico que conforman La Marina, La Harinera y Las Naves, «pero también para la instalación del comercio de proximidad en los bajos comerciales previstos», indicó Catalá. Habrá también tres parcelas de uso dotacional múltiple, según explicó Giner.

En su intervención, la primera edil recordó los «nudos» que encontró a su llegada al Ayuntamiento que «había que deshacer» y entre ellos, «quizá uno de los más paradigmáticos era el PAI del Grau, un sector clave para el futuro de Valencia que llevaba demasiado tiempo en un cajón, una 'patata caliente' a la que no se supo dar una solución y que hoy empieza a ser una realidad, una oportunidad para integrar totalmente a la ciudad con su fachada marítima, con barrios como Nazaret y Moreras, y ofrecer vivienda asequible, servicios públicos y desarrollo económico», tal como señaló Catalá.

El proyecto dotará a Valencia de más de 45.000 metros cuadrados para equipamientos públicos, que podrán destinarse a colegios, centros médicos, culturales o deportivos. Y más espacio para el uso ciudadano porque la superficie edificable sólo representa el 14,2 % de los 380.000 metros cuadrados de la actuación. Respecto a la vivienda y las infraestructuras, «dos retos de modelo de ciudad», la alcaldesa ha señalado que el PAI del Grau «va a permitir ganar 3.204 nuevas viviendas, de las que 780 serán de protección pública y cerca de 300 serán construidas por el Ayuntamiento para alquiler asequible y así garantizar el acceso a la vivienda en esta nueva zona de expansión de la ciudad».

«Nuestros compromisos son hechos porque en sólo dos años, tenemos en marcha, en distintos grados de actuación y bajo distintas fórmulas de colaboración público-privada, más de 1.000 viviendas destinadas a alquiler asequible. Y porque hemos impulsado 17 PAI que sumarán 7.826 nuevas viviendas, de las cuales 1.905 serán de protección pública», aseguró Catalá.

Asimismo, la primera edil desgranó nuevos objetivos de gobierno a nivel de infraestructuras como un puente que conectará Moreras y Nazaret con el Grau y el resto de la ciudad; dos depósitos de tormentas con capacidad para más de 6.000 m³, que contendrán las aguas contaminantes en episodios de fuertes lluvias y ofrecerán protección y seguridad hidrológica al barrio; así como la conexión de la avenida de Francia y la Alameda hacia la fachada marítima y destacó «la aportación directa de 5,9 millones de euros por parte de los urbanizadores para la financiación del soterramiento de vías de la Serrería para esta obra que debe realizar el Gobierno de España». El dinero estará disponible cuando se quiera acometer las obras de soterramiento.

Por su parte, Tomás señaló que este PAI «es la culminación del gran proyecto de ciudad que ha supuesto el ajardinamiento del río como un gran parque lineal, que amplía en 16 hectáreas las 100 existentes en el Jardín del Turia». Además, explicó que mediante este proyecto «se le da continuidad hacia el puerto abrazando la dársela y conectando con el paseo marítimo que también forma parte de la infraestructura verde y con el resto de espacios públicos enlazando, a su vez, con los corredores verdes que conectarán con la zona de huerta de La Punta y de Nazaret».

Preguntado por la alternativa habitacional que tiene pensada el Consistorio para las personas que viven en chabolas en la zona de actuación del PAI del Grao, Giner señaló que hay un plazo de dos años hasta que empiece la actuación, por lo que por los plazos que se manejan «no les va a afectar directamente». A su vez, Catalá respondió que «asentamientos han existido siempre en la ciudad» y abogó por «realizar cirugía social» a través de los Servicios Sociales, que están «volcadísimos» en esta cuestión. «Ya tenemos una estrategia de cirugía social en esa zona y hemos generado 60 plazas más, muy recientemente, para personas que acepten nuestra ayuda y podamos hacer con ellos un trabajo transversal», dijo.

Sobre el PAI de Benimaclet, cuya exposición al público terminó el pasado 3 de julio, el edil de Urbanismo puntualizó que se va a desarrollar «prácticamente a la vez», junto con el del Grao. «Los estamos impulsando con enorme diligencia, con enorme determinación, ambos y en paralelo. Nos importa el bienestar de Valencia», dijo Juan Giner en declaraciones a los medios.

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