Cambian un tramo del emisario de Vera por el riesgo de rotura en la Malvarrosa

Las obras se deben al riesgo de rotura detectado en agosto del pasado año, cuando se realizaron otras de emergencia que provocaban el vertido de aguas del aliviadero a la playa. Esto último fue largamente criticado por los grupos de la oposición en el Ayuntamiento, debido a que la demora en las reparaciones podían afectar a la calidad del baño.

El aliviadero es la segunda tubería del emisario de Vera, utilizada sólo en casos de que se produzca un aumento significativo del caudal. La concejalía del Ciclo Integral del Agua defiende que se trata de aguas sobrantes de la acequia de Vera, por lo que rechaza denominarlas residuales, aunque lo cierto es que el informe del Seprona por los vertidos utilizó este término.

Las obras, señalaron las mismas fuentes, tienen un presupuesto de unos 280.000 euros y fueron autorizadas por el Consell en agosto del pasado año. Las de emergencia costaron 104.000 euros y lograron taponar las fisuras por donde se escapaban los vertidos a unos 80 metros de la costa y 2,3 metros de profundidad. Fueron realizadas en mayo de 2020, cuando se concluyó que no habían sido suficientes para anular el riesgo.

El problema de la acequia de Vera es que vierten algunas alquerías sin conectar a la red de alcantarillado. Eso, unido a los restos agrícolas y otros residuos provoca la necesidad de que en las instalaciones de Vera, entre la playa de la Malvarrosa y la de la Patacona, funcione una barrera para frenar los sólidos, transportados después a un vertedero.

El plazo de entrega de las obras depende del estado del mar, como las corrientes u otros fenómenos meteorológicos, aunque están muy adelantadas. La gestión corresponde a la Entidad de Saneamiento (EPSAR), aunque se trata de una instalación municipal. Pese a esa circunstancia, es la Administración autonómica la que ejecuta el proyecto de renovación.

El mal estado de la conducción fue descubierto durante la reparación de la fisura. El portavoz de Ciudadanos en el Consistorio, Fernando Giner, criticó la falta de inspección rutinaria, pese a que el emisario sale a mar abierto a través de una playa galardonada con la bandera azul. Las críticas por las manchas arreciaron hasta el punto de que la portavoz del grupo popular, María José Catalá, llegó a pedir una comisión de investigación por el retraso en subsanar las deficiencias de las tuberías, lo que no fue aprobado.

En febrero de 2021, el Seprona tenía abiertas pesquisas para dilucidar posibles responsabilidades por los vertidos. El emisario de Vera tiene dos tuberías que llegan el sobrante de riego a mar abierto, en concreto a 2,5 kilómetros de la costa, donde sale el caudal a 17 metros de profundidad.

En el capítulo de los proyectos, el Ayuntamiento tiene aprobado un depósito de retención de 7.000 metros cúbicos de capacidad en el tramo final del colector general de Malvarrosa, en una parcela en la calle Isabel de Villena entre Font d'en Carròs y Mendizábal, que permitirá reducir el vertido de aguas residuales en la playa a través del emisario de Vera.