Ribó lleva al Tribunal de Cuentas tres expropiaciones del Parque de Cabecera

«Cuanto menos, negligente». Así calificó ayer el alcalde de Valencia, Joan Ribó, el comportamiento del anterior ejecutivo local, del PP, por no pagar en su momento 961.000 euros por dos expropiaciones en los terrenos del Parque de Cabecera que, tras ser recurridas, supusieron al Consistorio el desembolso de 18,2 millones de euros. El alcalde confirmó que llevará al Tribunal de Cuentas a buena parte de la anterior corporación local.

La intención es que el tribunal determine las «responsabilidades contables» que se pueden derivar de su decisión de no ejecutar y abonar «a tiempo» la expropiación de tres parcelas (la 21, 58 y 59) del proyecto de ejecución del Parque de Cabecera correspondientes a «dos familias de nombre conocido, los Cotino y los Gómez-Trénor». En concreto, llevará ante el Tribunal de Cuentas la actuación de la exalcaldesa y de otros ediles de la Junta de Gobierno Local que presidía «como Miquel Domínguez, concejal responsable de la Junta; Alfonso Grau, coordinador del área de Economía; Silvestre Senent, concejal de Presupuestos; Jordi Bellver, coordinador del área de Urbanismo, y Francisco Lledó, como responsable de expropiaciones».

Tanto Ribó como el concejal de Urbanismo, Vicent Sarrià, destacaron que la no ejecución de esas expropiaciones ha supuesto «un perjuicio económico de 17,3 millones de euros a las arcas municipales», dado que cuando se ordenó la expropiación eran suelos agrícolas y con el paso del tiempo se convirtieron en urbanos. Ni Ribó ni Sarrià se explican por qué el PP no pagó entre 2005 y 2006 las expropiaciones y se esperaron a que fueran recurridas.