«El miedo es un combustible»: el joven del pánico en el tren en Valencia exhibía su 'chaleco bomba' y posaba con un subfusil en redes
El detenido en Fuente San Luis no habló con los pasajeros y portaba un documento médico que detalla sus problemas mentales
«Este es mi regalo de cumpleaños». El mensaje lo colgó hace unas semanas en sus redes sociales el joven detenido en la estación de Fuente de San Luis por subirse a un tren con un falso chaleco bomba en la Estación del Norte de Valencia. El comentario se refiere precisamente a la prenda que ha dejado una mañana de nervios y tensión en un convoy de la línea C-3 con destino a Castellón.
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En sus redes sociales, el joven de 21 años y asentado en Beniparrell, exhibe el chaleco, con una bandera de España y la cruz de Borgoña, enseña tradicional de las tropas españolas. En la imagen aparece luciendo el chaleco con una camiseta militar de camuflaje.
No es el único contenido bélico de sus redes. En otra imagen colgada en sus perfiles aparece probando un subfusil con mira teléscopica en una armería de Valencia. El joven luce igualmente atuendo marcial, como una cartuchera en su cintura en la que se pueden ver otros objetos. «¿Te crees guay o qué, si no sabes disparar?», le reta otro internauta en un comentario a su foto, a lo que el joven no responde.
«El miedo es un combustible» es uno de los lemas que puede leerse en uno de los tres perfiles que tiene registrados en las redes sociales. En sus canales muestra cercanía a la ideología de extrema derecha, con no pocas publicaciones en las que carga contra la inmigración ilegal, la comisión de delitos por extranjeros, las okupaciones y algunos vídeos con intervenciones de Santiago Abascal, líder de Vox.
Según ha podido saber LAS PROVINCIAS de fuentes del caso, el joven sufre algún tipo de problema mental. Al ser detenido en el tren, el sospechoso portaba un documento médico que apuntaría este trastorno psíquico.
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Ha sido un pasajero del tren el que ha llamado al 112 al ver su chaleco y que del mismo salían varios cables y objetos metálicos. El joven no ha dirigido ni media palabra a los pasajeros durantelos minutos que el convoy se ha movido entre la Estación del Norte y la Fuente de San Luis. Cuando ha ido a bajarse en la estación, lo ha rodeado una nube de policías que lo han encañonado y obligado a tirarle al suelo. Tras identificarlo, la Policía Nacional ha comprobado que tenía una orden de busca y captura vigente por un juzgado.
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