A la caza del ladrón en la montaña de Gaibiel
Una treintena de vecinos ahuyentan con palos y linternas a un malhechor que robó en una casa del pueblo y organizan una batida con un visor nocturno desde el castillo
«Fuenteovejuna, todos a una» es la frase que mejor define la reacción de los vecinos de Gaibiel, una pequeña localidad de la provincia de Castellón con cerca de 180 vecinos censados. Cuando un ladrón tuvo la osadía de robar en una casa del pueblo y fue sorprendido por la dueña de la vivienda, la noticia corrió más rápido que el propio malhechor y los vecinos acudieron con palos y linternas para auxiliar a la víctima y ahuyentar al intruso.
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Los hechos sucedieron entre las ocho y media y las doce de la noche del pasado lunes. Tras escuchar los gritos de una mujer, las carreras y los pasos decididos resonaron en las calles de Gaibiel. Una treintena de vecinos, con el alguacil al frente, dejaron lo que estaban haciendo en esos momentos para ayudar a la víctima.
Un impulso común los empujó a salir de sus casas, con justicia en el alma y algún garrote que otro en sus manos, para demostrar que nadie roba impunemente en este rincón de la comarca del Alto Palancia cuando el pueblo entero vela unido.
El ladrón se coló por un balcón tras escalar la fachada trasera de la casa mientras los niños de la casa se encontraban en la planta baja con su abuelo materno, que estaba viendo la televisión y no oyó ningún ruido.
Tras regresar a su domicilio sobre las 20:30 horas del lunes, la mujer subió las escaleras y se dirigió a su dormitorio en la primera planta, y fue entonces cuando descubrió al ladrón, que cerró la puerta de la habitación y saltó desde el balcón a una terraza para escapar.
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Los primeros vecinos tardaron muy poco tiempo en llegar. Unos oyeron gritos y otros leyeron en el grupo de Facebook 'Memorias de Gaibiel' una petición de ayuda: «Están robando en casa de (...) Acudir gente porfa». ¡Y vaya si acudieron! Una treintena de personas llegaron de inmediato para prestar auxilio a la familia.
Mientras unos vecinos llamaban por teléfono a la Guardia Civil y avisaban también al alguacil del pueblo, otros empezaron a formar el primer grupo para buscar al ladrón por la zona donde lo habían visto correr en dirección al río: un paraje abrupto con maleza.
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A la batida se unió también un familiar de la víctima del robo, un joven que cogió la mira telescópica con visor térmico de su escopeta de caza, el mejor aparato para detectar por la noche el calor que emite un cuerpo humano. El joven subió con su coche a la parte alta de la montaña, donde se encuentra el castillo de Gaibiel, y desde allí dirigió la búsqueda.
Cada vez que veía la silueta de radiación infrarroja, el joven indicaba a gritos el lugar donde se escondía el ladrón, pero este se movía con rapidez y se arrastraba incluso como un reptil entre los arbustos, lo que dificultaba su captura.
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Durante tres horas y media, los vecinos formaron varios grupos y buscaron al malhechor en las fuentes del Vicario y los Caños, y también en la zona del puente de la Palanca, pero el individuo logró eludir el cerco vecinal y policial, ya que cuatro guardias civiles se unieron también al dispositivo de búsqueda.
El escurridizo ladrón consiguió escapar con una cantidad de dinero que encontró en un sobre y varias joyas pese al tesón y la solidaridad de los vecinos, que no dudaron en atender la petición de auxilio como un pueblo unido.
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Durante la noche del lunes, la alcaldesa de Gaibiel, Ester Giralte, y el teniente de alcalde, Ximo Pérez, hablaron varias veces por teléfono con el alguacil, quien les iba informando del operativo de búsqueda coordinado por los cuatro guardias civiles.
La noche del 14 de mayo de este año, otro ladrón o el mismo individuo intentó robar en otra casa del pueblo, pero en aquella ocasión fue descubierto por el sistema de alarma de la vivienda. El malhechor logró escapar tras otro cerco vecinal en plena noche que dirigió el mismo cazador con su visor nocturno. Y es que cada vez que ocurre un suceso en Gaibiel, como en la obra de teatro 'Fuenteovejuna' de Lope de Vega, «todos los vecinos vamos a una», afirma el alguacil con orgullo.
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Y como de justos es también ser agradecidos, la víctima del robo publicó este jueves el siguiente mensaje en el grupo vecinal de Facebook: «Queremos dar las gracias a todas las personas que se volcaron el otro día en ayudarnos con la búsqueda del individuo que la otra noche nos entró en casa, ya ni en casa puede estar uno tranquilo. Es injusto que pasen estas cosas».
La mujer afirma que no puede nombrar a todos los vecinos que le prestaron auxilio por si olvida citar a alguno, y añade: «Fueron muchos los que acudieron con rapidez y dispuestos ayudar, mas de una treintena de personas, sobre todo el frente joven de Gaibiel».
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El último párrafo del mensaje dice: «Uno cuando se ve rodeado así se siente más seguro, más arropado, y apreciado. No tengo palabras para describir todo el agradecimiento que sentimos hacia estas personas. Gracias de corazón a todos».
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