¿Cuáles son los mejores turrones de supermercado para comprar esta Navidad?

El turrón es, por excelencia, el dulce navideño. Aunque este año las fiestas sean un poco diferentes, este producto no puede faltar en las mesas durante las celebraciones de Navidad. Hay una gran variedad de tipos: turrón duro (o de Alicante), blando (o de Jijona), a la piedra, de coco, de cholocate y almendras, de trufa y de yema quemada.

Ante una oferta tan amplia, elegir cuáles van a ser los protagonistas de las comidas se convierte en una odisea. Por esta razón, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha analizado veinte turrones duros o de Alicante a la venta en supermercados. De esos, 19 son de la categoría 'Calidad Suprema' y uno de 'Calidad Extra'. Son turrones a base de almendras con un porcentaje del 60% si pertenecen a la categoría 'Suprema' y con un 46% si son de categoría 'Extra'.

Los criterios para valorar cada turrón son la valoración nutricional, la calidad de los ingredientes, la presencia de aditivos y la información del etiquetado, además de las calificaciones de degustación de un panel de expertos pasteleros. Dor (Lidl), Eroski Seleqtia y Antiu Xixona, de la categoría Calidad Suprema, han destacado como los mejores turrones duros de supermercado, según el estudio.

El precio medio por kilo del turrón duro de 'Calidad Suprema' de primeras marcas es de 22 euros, por los 12 euros de los productos de marca blanca. En concreto, el turrón Dor de Lidl tiene un precio inferior a los 10 euros y es el de mayor calificación con 86 puntos, mientras que los otros dos turrones más valorados, Eroski Seleqtia y Antiu Xixona, tienen un precio inferior a los 20 euros y una valoración de 85 y 81 puntos, respectivamente.

Los resultados del estudio son en general positivos, ya que la degustación es como mínimo aceptable para todos los turrones y no se encontraron aditivos. No obstante, trece de los veinte fabricantes abaratan costes sustituyendo parte de la miel y el azúcar por jarabes de glucosa y azúcares invertidos.

Pasados los días de las densas comidas de Navidad, a veces, sobra turrón. Para conservarlo, la OCU recomienda guardar el turrón en un lugar fresco, alejado de la humedad. La nevera no es buen sitio porque puede abosrber olores y además, la almendra se humedecería y ablandaría en exceso.

Otra opción si se tiene restos de turrón en una paquete abierto es aprovechar y hacer alguna receta que tenga este producto como base.

La organización ha aprovechado para recordar que se trata de un alimento muy calórico, pues contiene alrededor de 550 kcal por cada 100 gramos, por lo que debería de ser un producto de consumo ocasional.