'Kidulting' también para seniors o cómo envejecer jugando
La tendencia a practicar juegos propios de la infancia o la adolescencia se extiende incluso entre la generación 'boomer', una deriva con un lado peligroso según los expertos: no aceptar el paso del tiempo.
El caballero que aparece a la izquierda de la foto es un benefactor de la humanidad, aunque tal vez no lo sabía mientras jugueteaba como ... vemos en la imagen con un socio sobre un tapete dispuesto en el suelo, marcado con círculos, que definió en estos términos: «Aparato para jugar a un juego en el que los jugadores constituyen las piezas del juego». Estamos hablando del pasatiempo conocido como Twister, ese tablero de plástico con círculos de colores en el que sólo se necesita una ruleta y estar descalzos. Una criatura que Mr. Charles Foley patentó luego de numerosos azares (en realidad, era una idea promocional para comercializar betún para el calzado infantil) y que hizo realidad el sueño de sus coetáneos: de los de entonces y de los siguientes. Envejecer jugando. Es decir, llegar a la edad adulta practicando el llamado 'kidulting'. Ser niños mientras encanece el pelo: una fantasía al alcanza también de las franjas de población de edad más avanzada.
Publicidad
Introducción. De qué hablamos cuando hablamos de 'kidulting'. Se trata de una tendencia arraigada en nuestra sociedad en los últimos años, surgida en el ámbito del entretenimiento, con un toque más o menos pop, que nace de combinar las palabras «kid» (niño) y «adult» (adulto) para describir la aspiración cada día más enraizada entre el mundo adulto de revivir sus años de niñez a través de juguetes, películas y experiencias que les conectan con su infancia. ¿Por ejemplo? Mediante el twister de Mr. Foley: un pasatiempo para los más pequeños de la casa que también pueden practicar los mayores... e incluso los mayores entre los mayores. La generación 'boomer'.
Nudo. La entronización del concepto del juego en nuestra sociedad, su extensión a todas las franjas de edad y sus vínculos con otros poderosos aliados muy presentes en la psique colectiva (la nostalgia, la búsqueda de consuelo emocional para lidiar contra el estrés y otros enemigos de la salud mental) justifican que el 'kidulting' goce de un impacto considerable entre nosotros, sobre todo porque se alía con otros atributos propios de la generación senior: su mayor poder adquisitivo, que convierte a este sector de la población en una clientela potencial muy tentadora para la industria del entretenimiento. También juega a favor de su popularidad la propensión al coleccionismo que distingue a numerosos miembros del ala más adulta de la sociedad.
Conclusión. Sacramento Pinazo-Hernandis, profesora titular del Departamento de Psicologia Social y miembro del Instituto Interuniversitario de Desarrollo Local de la Universitat de València, que ha estudiado en profundidad el fenómeno de los 'boomers', «volver a la infancia y no salir de la adolescencia me recuerda a la búsqueda de la eterna juventud». Una impresión que alumbra una reflexión de fondo: «En la sociedad en que vivimos prima lo nuevo, lo último, tienen poco peso las cosas de siempre las cosas de siempre y las personas mayores, que suelen ser invisibilizadas en la esfera social». De ahí que hable del síndrome de Peter Pan que caracteriza a quienes se entregan al 'kidulting': «Como creen que nunca llegarán a ser mayores, se involucran en actividades propias de jóvenes o de niños».
Publicidad
Coda adicional. A la experta de la UV le parece que esta clase de fenómenos tiene su «parte bonita» («Les ayuda a recuperar con nostalgia esos momentos en que fuimos felices», opina« pero también alerta del lado peligroso de abandonarse a una pretensión en realidad irrealizable: nadie es joven eternamente. ¿Demasiado 'kidulting' es perjudicial para la salud? »Hay quien se queda ahí, en ese momento vital, como si no se notara la edad que tiene«, observa. Y añade: »Rechazar la vejez es un signo de los tiempos«. »Muchas personas«, prosigue, »se compra la ropa en las mismas tiendas donde se la compran sus hijas, Stradivarius y marcas de este tipo, o quieren volver a hacer las cosas que hacían cuando eran adolescentes pero yo creo que es más importante que nunca aceptar el paso del tiempo«. ¿Resumen? »Eso no quita para seguir disfrutando de la vida o seguir jugando: siempre es bueno recuperar aquello que nos hace felices«.
Suscríbete a Las Provincias al mejor precio
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión