Oliva contrata personal para vigilar la zona de baño de la Font Salada ante el incremento de visitantes

El Ayuntamiento de Oliva ha adjudicado el contrato para los servicios de vigilancia rural del paraje de la Font Salada, ubicada en el parque natural del marjal de Pego-Oliva. Se trata de una necesidad detectada a raíz del aumento significativo de los visitantes en la zona y también de las conductas incívicas detectadas, y con el fin de preservar los valores naturales del parque, tanto la flora y fauna como la calidad de las aguas.

Esta medida complementa la limitación del aparcamiento en el camino de acceso, que recientemente se aplicó, a fin de garantizar el paso de los vehículos de emergencia en caso de necesidad.

El servicio de vigilancia se prestará 6 horas al día, en horario de mañana y tarde, 4 días a la semana, con especial intensidad el fin de semana. Tendrá un plazo de 8 semanas (agosto y septiembre) y un coste de 5.808 euros, a cargo del Ayuntamiento de Oliva.

Los servicios de vigilancia se han contratado para hacer cumplir las normas de uso del parque como la prohibición de tirarse de cabeza, el baño de animales, de acampada o de poner música.

El personal contratado trabajará en un ámbito de actuación que comprende la Font Salada, el camino de acceso y su entorno inmediato, y siempre en colaboración con el Departamento de Medio Ambiente y la Policía Local.

Maria Bertomeu, concejal de Medio Ambiente: «Debemos ser conscientes de que la Font Salada está en un parque natural protegido y, por tanto, con unas normas de uso claras para garantizar su protección. Próximamente, se instalarán carteles explicativos con las normas en el paraje, pero de momento ya tendremos un servicio de vigilancia para garantizar, con sentido común, que los visitantes de la Font Salada sean conscientes de la importancia del lugar donde están y que colaboren en su protección«.

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