Enguera actúa para evitar la desaparición de su castillo

El Ayuntamiento de Enguera ha concluido la primera acción para recuperar de su estado ruinoso su principal emblema patrimonial: el castillo de la Encomienda, que, pese a dicho estado de conservación fue declarado Bien de Interés Cultura.

La primera actuación ha sido la restauración de la muralla norte que se encontraba en riesgo de colapso y en la que se han invertido 40.000 euros, gracias a una ayuda de la Diputación de Valencia.

La actuación finalizaba hace unas semanas después de dos meses de trabajos en los que se ha consolidado la obra y se ha añadido un tratamiento biocida, para eliminar el musgo, así como otro hidrófugo para reducir la humedad.

Y es que, según explican los técnicos, es el agua de la lluvia el principal causante de los desperfectos de esta construcción del siglo XII que corona una montaña en Enguera. La filtración del agua y su posterior congelación provoca que se fracture la piedra.

Parece ser que la intención es no quedarse solo en esta actuación, sino que la idea es continuar para evitar la desaparición de esta fortaleza, dado su estado ruinoso, debido, según los expertos, a los efectos del terremoto ocurrido en 1748.

Al respecto, el arqueólogo de Enguera, Juan José Castellano explica que «en la parte arquitectónica no se había intervenido nunca y ahora se va a redactar un plan director para ir rehabilitándolo según la inversión con la que contemos».

El castillo de la Encomienda de Enguera consta de dos recintos, uno inferior, con restos de torres rectangulares en los ángulos y la entrada, y el superior, un recinto rectangular con restos de cortinas y torres angulares, una torre avanzada con saeteras y un bastión protegiendo la entrada.

Valor patrimonial e histórico

El Castillo de la Encomienda de Enguera es «un referente» para los ciudadanos de esta localidad de la Canal de Navarrés y aparece en el escudo de la ciudad.

Esta fortaleza tuvo un papel destacado para Jaume I que en 1244 la cedió a la Orden de Santiago y se convirtió en el primer cinturón de defensa.

Las excavaciones realizadas en la fortaleza en el año 2003 pusieron, además, al descubierto, una amplia variedad de cerámicas medievales de cronología cristiana.