Dos años sin respuestas para la familia de un fallecido al chocar con su coche contra un caballo

«¿Qué hace falta más para que se actúe?». Es la pregunta que se hace Marcos Falcó, el hijo del hombre de 66 años que fallecía hace dos años, concretamente el 3 de diciembre de 2018, tras colisionar su coche con un caballo que se había escapado de un asentamiento ilegal en la carretera que une Bellús con Benigànim, en la Vall d'Albaida.

La vía judicial está en manos de sus abogados, que ya le advirtieron que el caso iría para largo en el tiempo, pero lo que no entiende como aún pueden estar los caballos ahí, poniendo en peligro la vida de los vecinos tanto de Bellús como los de Benigànim. ¿Quién es la autoridad que debe de clausurar definitivamente este asentamiento?, reitera e insiste en que «la vida de mi padre no puede quedar en vano».

El de su padre fue un caso mortal, pero son muchos los vecinos de ambos municipios que se han encontrado con los animales mientras circulaban por la carretera, «incluso alguno ha tenido que parar su vehículo y quitar los caballos de la vía para poder seguir circulando, llevándoles incluso hasta las instalaciones que tienen la puerta abierta», asegura Marcos.

La explotación equina, aunque está situada junto al pantano de Bellús, pertenece al término municipal de Benigànim.

Desde el consistorio, la alcaldesa, Amparo Canals, asegura que se trata de un asunto complejo en el que están trabajando los servicios jurídicos municipales. «Nos está resultando más difícil de lo habitual por diversas circunstancias», ha manifestado y no ha querido hablar de esas circunstancias y dice que en su momento lo darán a conocer. Ya en el pleno municipal de 26 de mayo pasado, el concejal del PP, Miguel Boluda, preguntó sobre este asunto. Desde el equipo de gobierno aseguraban que el Ayuntamiento había abierto un expediente sancionador de cierre contra la empresa que gestiona esta explotación.

Pero ya apuntaban que el tema es complejo, principalmente porque el responsable de los caballos está en paradero desconocido y aseguraban que estaban estudiando la manera de sacar de allí a los animales que hay, siguiendo los trámites legales que se aplican a una empresa ilegal de este tipo.

Sin embargo, aún se pueden ver algunos de estos equinos en la finca, sin que se sepa quien está cuidando de ellos.

Marcos Falcó indica que tras el accidente que sufrió su padre, en el juzgado número 3 de Ontinyent, le comunicaron que se habían abierto diligencias para investigar lo sucedido, pero casi dos años después aún no sabe nada al respecto. Es más, lamenta que no se haya resuelto esta situación tras haber perdido a su padre, algo que puede ocurrirle a cualquier otro de los muchos vecinos que transitan por esta carretera, muchos de ellos de Bellús que trabajan diariamente en Benigànim.

Otros accidentes

Los hechos ocurrieron a las 18.30 horas de la tarde del 3 de diciembre cuando Juan Vicente Falcó, de 66 años, vecino de Bellús, circulaba por la CV-612 y colisionó contra un caballo que se encontró en la vía y murió en el acto.

No es el primer accidente que provocan este tipo de animales. Ese mismo año (2018) pero mes y medio antes de este trágico suceso, dos caballos provocaron un accidente en la V-31, colapsando además la salida de Valencia por la pista de Silla. En este caso, los equinos se escaparon de un corral de un polígono entre Albal y Catarroja.