El ministro Garzón alerta en Valencia del apoyo del PP a las políticas «xenófobas y clasistas»

El coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, se ha desplazado este sábado a Valencia para participar en la interdepartamental de Izquierda Unida. La consellera de Transparencia, Rosa Pérez Garijo, ha ejercido de anfitriona del ministro, pero también del resto de cargos nacionales y europeos de la formación de izquierdas que se han citado en Alboraia.

Garzón ha reflexionado acerca del problema del Partido Popular, que no era únicamente cuestión «de liderazgo», sino más bien de «su absoluta tolerancia con las políticas xenófobas, racistas y clasistas propias de la extrema derecha española».

El responsable gubernamental ha recelado de la etiqueta de moderado de Feijóo cuando se ha estrenado abriendo la puerta a las políticas machistas, xenófobas y racistas en Castilla y León. «El problema es de ideología, más que de liderazgo, en la relación del PP con la extrema derecha», ha insistido.

En la misma línea, ha reivindicado el aislamiento de otras democracias como la alemana o la francesa a los partidos de extrema derecha, circunstancia que no se repite en España. Garzón ha avisado del «peligro» que tiene que el «modelo de Castilla y León se extienda por nuestro país, y ello nos obliga a resaltar nuestro proyecto político para hacerle frente».

El ministro, por otra parte, ha calificado como «necesaria y útil» la medida de limitar los precios de la energía para que el gas no sea el que marque el precio de todas las modalidades. Ha recordado que es algo que pidieron «hace muchos meses y que se nos dijo que era imposible», por lo que ha criticado que, al final, esta cuestión dependía de »la voluntad política y no de problemática técnica». «Lo que antes era imposible, ahora sí es posible», ha lamentado.

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