Recuerdo unas palabras de mi tía abuela, «solo os acordáis de Santa Bárbara cuando truena» y en esta ocasión, no sólo tronó. Hubo una lengua ... de barro, llena de vida ya inerte, coches y todo tipo de residuos, que se dirigía firme y arrolladora por el barranco del Poyo hacia lo que para los valencianos es la joya de la corona, L'Albufera.
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