Valencia y Aldaia se vuelven a enfrentar por el nuevo cauce
El Ayuntamiento de l'Horta lamenta que Catalá vuelva a «cuestionar la viabilidad de la conexión de la Saleta»
Las alegaciones al Plan de la Confederación del Júcar para la recuperación y mejora de la resiliencia frente a inundaciones en el territorio afectado por la dana han vuelto a enfrentar al Ayuntamiento de Valencia y al de Aldaia a raíz de la conexión de la Saleta con el nuevo cauce.
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El Consistorio de l'Horta señaló este martes en un comunicado que entre otros puntos, el «Consistorio de Valencia vuelve a cuestionar la viabilidad de la conexión de la Saleta». Desde Aldaia lamentaron que la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, «siga empeñada en bloquear este proyecto, lo que podría provocar que este vuelva a paralizarse durante años, con las consecuencias nefastas que ya conocemos y que los vecinos y vecinas de Aldaia sufrimos el 29 de octubre».
Además, recuerdan que «los técnicos y los ingenieros de la Confederación y del CEDEX ya verifican que la solución de la Saleta es totalmente asumible por el Túria». Por último, desde el Ayuntamiento de Aldaia vuelven a reclamar a Catalá «que escuche a los científicos» que están avalando la viabilidad de este proyecto.
Estas mismas palabras puso de manifiesto el alcalde de Aldaia, Guillermo Luján, en la última sesión de la comisión de la dana de la Diputación. Sin embargo, no tuvo respuesta al no haber presente ningún representante del Ayuntamiento de Valencia.
Sobre las alegaciones, el gobierno municipal de Valencia subraya la necesidad de realizar un estudio conjunto de las cuencas de los barrancos de Poyo y de la Saleta «para determinar las actuaciones a realizar para reducir los riegos de desbordamientos en ambos márgenes del nuevo cauce del río Turia».
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Desde la concejalía del Ciclo Integral del Agua se hace especial mención de la denominada «Vía verde del barranco del Poyo y desvío a nuevo cauce del Turia«, dado que como ya se indicó en las alegaciones formuladas para el desvío del barranco de la Saleta previo a la solución definitiva, «se requiere de un análisis conjunto de las cuencas de los barrancos Poyo y Pozalet – Saleta y sus posibles desvíos al nuevo cauce del Turia, donde se valoren todas las alternativas cuyo condicionante principal sea que no se incremente el riesgo de desbordamiento del nuevo cauce del Turia en ambos márgenes».
Por ello, subrayó el concejal del Ciclo Integral del Agua, Carlos Mundina, la medida de protección relativa a la adecuación del nuevo cauce del rio Turia «debe ir de la mano del estudio conjunto de las cuencas de los barrancos Poyo-Saleta para determinar las actuaciones a realizar para reducir los riegos de desbordamientos».
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Alegaciones por la conexión de la Saleta
El Consistorio de Valencia ya alegó contra el estudio de paisaje de la conexión del barranco de la Saleta con el nuevo cauce. Como adelantó LAS PROVINCIAS, el grueso de las alegaciones fueron desestimadas y la iniciativa sigue adelante, salvo algunas mejoras menores que se incorporarán.
En el caso de Valencia, desde el área de Urbanismo se informó favorablemente al estudio de integración paisajística. En el documento se indica que los cálculos correspondientes de caudales de afluencia y de capacidad del nuevo cauce para poder soportarlos «deben realizarse con la mayor concreción posible para evitar futuros problemas».
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A esto, la Confederación del Júcar responde que la capacidad hidráulica de diseño del nuevo cauce del Turia es de 5.000 m3/s, y aunque en la actualidad la capacidad se ha reducido a unos 4.200 m3/s debido a los puentes y a otras actuaciones que se han ido acometiendo a lo largo de los años. El Qmax derivado por la conducción es de 130 m3/s, lo que representa un 3% de la capacidad del nuevo cauce, siendo además muy baja la probabilidad de que coincidan las puntas.
En el proyecto constructivo se contempla un estudio de la compatibilidad de los caudales entre el barranco de la Saleta y el nuevo cauce del Turia. Se ha comprobado hidráulicamente diferentes hipótesis que justifican que el desagüe al nuevo cauce del Turia de 130 m3/s no tiene afección significativa sobre los caudales que soportaría el Turia y que no se perjudica a terceros.
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Otra de las cuestiones trata sobre la conexión prevista entre el barranco del Poyo y el nuevo cauce. Aunque no forma parte del estudio, contestan desde el organismo estatal de agua, se comenta que estudios del 2012 de la UPV ya proponían actuaciones que permitían aumentar la capacidad hidráulica del nuevo cauce del rio Turia, y que servirán de base para las soluciones que se pretenden abordar en el corto plazo.
«Concretando en el nivel de protección de las pedanías de Valencia, hay que señalar que esta actuación de la Saleta, ya supone una mejora respecto la situación actual, en la que los flujos desbordados no tienen salida y discurren en pegado por la carretera V-30 hacia el sur a buscar estas dos pedanías, por lo que una salida del barranco de la Saleta a la altura de la EDAR de Quert-Benàger supondrá permeabilizar la V-30 y que esos flujos no se dirijan hacia el Sur».
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