El calor, el telonero aguafiestas de los conciertos
Retrasos en el inicio de las actuaciones, quejas de usuarios por la falta de toldos en los recintos y lipotimias por las aglomeraciones van a más mientras los festivales de música de la Comunitat tratan de contrarrestar las altas temperaturas con más piscinas, puntos de agua fresca 24 horas y bungalós con aire acondicionado
A las 17 horas del pasado sábado se abría el acceso al recinto de Homenaje a la Ruta. Ese día el mercurio y la falta ... de brisa dejaban un ambiente asfixiante en la Marina de Valencia, donde se celebraron los conciertos. En las redes sociales, algunos usuarios apuntaron la necesidad de instalar toldos que confieran sombras a los asistentes. Luego fueron la lluvia y el vendaval los que obligaron a un cierre abrupto. Ese mismo día Rigoberta Bandini retrasó una hora el inicio de su concierto en el Ciutat de València por las altas temperaturas y su 'Jesucrista Superstar' empezó a las 22 horas.
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Las altas temperaturas, que pueden ejercer como el telonero aguafiestas de la música, están obligando a introducir cambios en la celebración de conciertos. Algunos son a ultima hora, como sucedió en la última edición del Festival Bigsound. Como medida especial, la quinta edición de los marcroconciertos se reforzó el punto de avituallamiento de agua gratuito y hubo reparto de protector solar en los aseos del recinto. Aún así no se evitó una cascada de lipotimias el pasado junio en la Ciudad de las Artes.
Las organizaciones de consumidores llevan desde hace años una lucha para que los festivales dejen entrar bebida al público e instalen puntos de agua gratuitos. Desde Facua Valencia redoblan las peticiones y apuntan que estas citas deberían informar a los asistentes sobre los riesgos para la salud por deshidratación con altas temperaturas, alcohol y aglomeraciones.
Los festivales de música de la Comunitat Valenciana trabajan ya para aumentar las medidas. Así, cada vez gana más enteros el inicio del primer concierto a las 20 horas. Es el caso de las citas Zevra (del 18 al 21 de julio) y Medusa (del 7 al 11 de agosto), porque a las 19 horas todavía aprieta el calor en Cullera. El Pirata Beach, que se celebra del 9 al 12 de julio en Gandia, programa las primeras actuaciones a las 19.30 horas mientras que el FIB mantiene las 19 horas (Javiera Mena, La Habitación Roja y Margarita Quebrada, entre otros) para muy pocos artistas.
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Otro de los cambios introducidos por los festivales pasa por el alojamiento. La zona de camping se mantiene y en el caso de los festivales Zevra y Medusa, que se celebran en Culltera, se dispone de «50.000 metros cuadrados de zona de acampada techada con parasoles de rafia». Además de las tiendas de campaña ganan terreno otro tipo de instalaciones: los bungalós, que incluyen ventilador y aire acondicionado.
Obviamente el precio del bungaló es más elevado, pero es una opción que cada vez interesa a más asistentes. Algo similar pasa con el acceso a la piscina. En el caso del Low Festival de Benidorm, que tiene lugar del 25 al 27 de julio, el abono VIP, el de mayor precio, tiene acceso a una piscina olímpica.
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En el Zevra y Medusa están habilitados, según la organización «350 puntos de agua corriente fresca en la zona de descanso» y ofrecen «agua potable gratis 24/7 para los asistentes». Uno de los escenarios está techado y en otro hay tres piscinas.
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