El Gobierno rescata ahora un plan de hace 20 años para paliar las riadas en el Júcar

Esta semana se cumple el 40 aniversario de la rotura de la presa de Tous, un incidente que marcó la vida de los habitantes de la Ribera. Han pasado los años y muchas de las deficiencias que se detectaron todavía no se han corregido. Ahora la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) va a recuperar un plan de hace dos décadas para poner en marcha algunas de las actuaciones que allí se proponían.

En el año 2000 se aprobó la puesta en marcha de un programa global contra inundaciones con un presupuesto de mil millones de euros que finalmente no salió adelante por el mismo volumen de las inversiones propuestas, según matizó el presidente de la CHJ, Miguel Polo. Ante esta situación la Confederación ha puesto en marcha un nuevo plan que prioriza algunas de las actuaciones. Ese mismo año se planteaba la construcción de tres presas en el curso de los ríos Cànyoles, Sellent y Magro. Ahora se va a poner en marcha la redacción del anteproyecto de la presa de Montesa en el Canyoles que se ubicará entre Montesa y Vallada. Las otras dos, según especificó el presidente del órgano de cuenca, están prácticamente descartadas.

Por otro lado, dentro de esta estrategia de priorización de actuaciones, la Confederación, y de forma inmediata según señaló su presidente, va a a realizar actuaciones en los barrancos de La Casella y Barxeta en las localidades de Alzira y Carcaixent.

Polo también destacó que con la construcción de las presas que se hicieron «no se elimina el riesgo de inundación en la Ribera porque hay ríos que no tienen regulación como el río Canyoles, el Sellent y el Magro».

Por otro lado, y con ocasión del 40 aniversario de la pantanada, la Confederación del Júcar con la Facultat de Geografia i Historia y el Colegio de Ingenieros de Caminos ha organizado unas jornadas en las que se contará lo qué paso, se hablará de la responsabilidad de los ingenieros en estas situaciones y se presentará qué actuaciones van a llevarse a cabo desde la CHJ. Se trata de «hacer justicia» cuatro décadas después de la catástrofe, al mismo tiempo que se «mira hacia el futuro». Las actividades se llevarán a cabo entre el 19 y el 21 de octubre.

El presidente indicó que la jornada del 19 tendrá lugar en el Ayuntamiento de Algemesí, donde se contará qué actuaciones van a llevarse a cabo desde la Confederación para mejorar la gestión de las inundaciones en la Ribera del Júcar, ya que para la institución es «muy importante».

La jornada del 20, que tendrá lugar en la Facultad de Geografía e Historia, estará centrada en contar lo que sucedió y en la del día 21, que se celebrará en el Colegio de Ingenieros de Caminos, se hablará de la responsabilidad que tienen los ingenieros en las obras públicas porque «el colapso de la presa de Tous además de llevarse muchas cosas por delante, también se llevó a un ingeniero, al que se le responsabilizó de la catástrofe y de eso pocas veces se habla».

Por su parte, el decano de la Facultad, Josep Montesinos, indicó que desde la UV tenían organizada una jornada que tuviera una vertiente «fundamentalmente» académica en la que se presentaran investigaciones realizadas por profesorado de la UV y a la que también acudieran personas que habían vivido este acontecimiento.

Por su parte, el decano del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de la Comunitat Valenciana, Javier Machí, señaló que «es de justicia que esto se haga y podamos recordar», al tiempo que resaltó que «hay que mirar hacia el futuro».

«El Plan General de Defensa de Inundaciones de la Ribera de 1985 supuso un cambio significativo en la forma de comportarse las inundaciones en la comarca», subrayó el decano. No obstante, indicó que «no fue suficiente», ya que «se rectificó, se corrigieron márgenes, se restituyeron los trazados de los cauces en la parte alta de la cuenca, entre otras actuaciones».

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