Urgente Números premiados de La Primitiva de este sábado 6 de diciembre

El comercio celebra la decisión y pide un pacto con los promotores para evitar llegar a los tribunales

El asesor municipal del área e histórico dirigente del colectivo Pedro de Gea dice que se ha impuesto «la sensatez» gracias al trabajo del sector durante años

Eva María Lahoz

Jueves, 2 de julio 2015, 02:02

El comercio local de Alicante respira desde ayer algo más aliviado. Después de años de abanderar las protestas contra el plan Rabasa, primero, y contra la ATE de Ikea, después, la noticia de la paralización del proyecto urbanístico comercial es una de las mejores que podían recibir. Lo hicieron, eso sí, con alegría «contenida» porque prefieren esperar a saber qué pasará definitivamente con él antes de «descorchar el champán».

Publicidad

«Satisfecho» se mostraba también Pedro de Gea, histórico dirigente del Colectivo de Comerciantes por Alicante que abanderó las alegaciones del mismo al plan Rabasa y asesoró a su sucesor en el cargo, Domingo Martínez, en las de la ATE. Ahora es la mano derecha del alcalde, Gabriel Echávarri, en cuestiones de Comercio, ya que es el asesor que se encargará de manejar este área.

«Es lo lógico y lo normal», señalaba, respecto a la paralización de la ATE. «Se trata de un proyecto que no tenía ni pies ni cabeza, no era una demanda de la ciudad, estaba hecho para tirar el hormigón que sobraba de las viviendas que ya no se venden, era irreal», aseveró. Celebró que se haya impuesto «la sensatez» y confió en que sea el «punto final de este proyecto y de otros similares».

De Gea consideró que la decisión de ayer llega «gracias a años de trabajo por parte del colectivo, que ha contado, y mucho, pese a que nos querían convencer de que no valía la pena porque estaba todo hecho».

El actual presidente del Colectivo, Domingo Martínez, resaltó que para el sector es «una alegría» que se paralice la ATE, aunque «contenida» a la espera de ver qué hace definitivamente el Consell con el proyecto. «No descorcharemos el champán hasta que sepamos que lo que se hace en Rabasa es compatible con el comercio de la ciudad», añadió. Avanzó que hasta la suspensión o modificación definitiva del proyecto «queda un proceso largo, que puede llegar de nuevo a los tribunales». Para evitarlo, pidió a los dirigentes «que negocien busquen un acuerdo con los promotores que sea beneficioso para todos».

Publicidad

Desde la Federación Alicantina del Comercio de la Pyme, Facpyme, su secretario, Francisco Rovira, también mostró su alegría por la decisión del Consell, que resaltó que era «previsible, porque ya lo habían anunciado los partidos durante la campaña».

Agradeció, eso sí, que se hayan acordado del comercio de proximidad en su primera reunión plenaria, no solo con esta medida, sino con otras relacionadas con la suspensión de licencias a grandes superficies o la revisión de las zonas de gran afluencia turística. «Esperamos que sigan en esta línea de apoyo al comercio urbano», señaló Rovira.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete a Las Provincias al mejor precio

Publicidad