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El rey de la Copa es Hugo Duro
El oportunismo del delantero deja de cara la eliminatoria para que Mestalla empuje al equipo hacia la decimoctava final
El fútbol es monárquico y tiene un indiscutible rey.
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Athletic Club de Bilbao
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Valencia CF
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ÁRBITRO Munuera Montero (Comité Andaluz). Amonestó a Foulquier, Dani García, Diakhaby y Hugo Duro.
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GOLES 1-0, Raúl García (37'). 1-1, Hugo Duro (65').
Fue un partido muy táctico, con dos esquemas de juego similares. Se habían estudiado al milímetros los íntimos enemigos. Ahora se saludan, antes no se podían ni ver. La presión de ambos era escalofriante. No se dejaba sacar de portería. Allí se multiplicaban los futbolistas. El inicio del choque fue cardiaco, con Diakhaby como el referente. Cada acción del francés elevaba las pulsaciones del personal. Un pase atrás del central al portero estuvo a punto de convertirse en el gol tonto de la temporada, al fallar el portero en el despeje. Conforme pasaban los minutos el Valencia se desinflamaba y el Ahtletic se crecía. Y con ocasiones. Una de Williams pudo molestar. Hasta que llegó una falta que no era. El árbitro señaló un pisotón de Carlos Soler a Muniain cuando justo ocurrió al revés. El centro del delantero fue excelso y Raúl García se aprovechó. El Valencia se apagaba en el centro del campo. Bordalás ya miraba al banquillo para variar la tendencia. Pensó en Maxi Gómez. Pero el uruguayo hizo una de las suyas. Se autoexpulsó en el descanso al meterse en alguna trifulca. A falta del delantero ideado como referencia, bueno es Hugo Duro. Y tan bueno. En una magnífica jugada por la banda derecha de Guedes, el centro fue rematado por Bryan Gil y el rechace del portero lo aprovechaba el delantero, el estudiante de ingeniería mecánica, el chico ideal. Con Guedes activado y Hugo Duro enchufado el Valencia es mucho más. Aún tuvo otra ocasión factible en un remate propio del barrio en el que creció. Es un futbolista de calle, vivo, inquieto, necesario para triunfar. Luego llegó el posible penalti que le hizo Vivian. Ahora queda Mestalla (recuerden que los goles fuera ya no valen doble), pero el estadio valencianista sí vale doble. Y, mientras, honores a nuestro rey de la Copa.
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