Urgente El Cuponazo de la ONCE deja 6.000.000 euros a un único afortunado este viernes
Al compás

Bravura que emociona

Pedro Toledano

Valencia

Lunes, 18 de marzo 2024, 23:44

Se cierra un abono que nos ha traído muchas cosas buenas, algunas excelentes, de importancia auténticamente relevante para que la fiesta siga creciendo. Todavía queda ... bajar el telón esta tarde. Anunciado está un lote de Montalvo, que ya la temporada pasada dejó las espadas en alto al lidiar varios ejemplares bravos, encastados y nobles. Paco Ureña, torero que cada vez que pisa el albero valenciano sigue sumando partidarios, hará el paseíllo escoltado por el entusiasta Fandi, y el bravo Emilio de Justo. Toros y espadas, atesoran argumentos para poner brillante broche a una feria que está contando también con una gran asistencia de público.

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Como avance de los resúmenes que vendrán, por el gran impacto que causó en el gentío que abarrotaba la plaza, no nos resistimos a dejar para mas tarde el reconocimiento de la bravura, la clase y, algo que enamora a los amantes del toro de lidia, las hechuras, en este caso del toro Leguleyo, de Jandilla, al que Roca Rey -otro destacado-, le planteó una lidia para que, si las tenía, y cierto que sí las tuvo, sacara todas las virtudes que debe tener un toro de vacas. En el trasteo hubo exigencia al someterlo sin escatimar exposición, templanza para que aflorara todo su celo, y pulso para que las telas acariciaran sus encastadas embestidas.

La estocada corta que puso firma a la gran obra, también propició que el toro luciera su gran bravura al hacer frente a la muerte en el mismo platillo de la plaza. Ante la pregunta si tenía que haber sido indultado, desde mi condición de aficionado la respuesta es rotundamente sí. Que en el tercio de varas fue levemente castigado, cierto, pero es que hoy, un toro bravo si le das la oportunidad de que se entregue en varas y no lo mides, y Leguleyo acudió con celo en las dos veces reglamentarias, es muy poco probable que le quede energía para comportarse como lo hizo el pupilo de Borja Domecq, y con ello se le hubiera birlado a los aficionados el gran espectáculo que tuvieron la suerte de disfrutar. Cuestión de sensibilidades.

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