La Semana Santa, a vista del balcón

Es difícil vivir la experiencia religiosa y las tradiciones de la Semana Santa Marinera de Valencia transmitidas de generaciones en generaciones sin salir de casa, pero esa es la penitencia que están viviendo los amantes de esta fiesta como consecuencia del confinamiento obligado para evitar el contagio del coronavirus que tanta vidas se está llevando por delante estos días.

El pasado Viernes de Dolor la imagen ya fue muy diferente con calles vacías, sin las Dolorosas ni la custodia de los Granaderos ni el sonido de la percusión ni de las trompetas. Ayer la bendición masiva de palmas no se pudo vivir en el centro de la ciudad y tampoco en los Poblados Marítimos y fue un Domingo de Ramos distinto. Eso sí, los párrocos de Santa María del Mar, de Nuestra Señora del Rosario del Canyamelar, de Nuestra Señora de Los Ángeles del Cabanyal y de Cristo Redentor-San Rafael, sí continuaron la tradición y efectuaron la bendición de palmas y la misa a puerta cerrada, sin feligreses.

«Lo primero es lo primero y como hay que cumplir con el confinamiento he hecho la bendición de palmas sin público. Se ha grabado con el móvil y la he difundido a la junta parroquial para que vivan de alguna manera el Domingo de Ramos», explica Juan Pedro Escudero, párroco de Cristo Redentor-San Rafael, que se cubrió con guantes y mascarilla.

Por ejemplo, el párroco de Los Ángeles, Fernando Tomás March, también ofició la misa a puerta cerrada, pero lo hizo en la capilla del Cristo del Salvador, imagen que este año no podrá procesionar el viernes en el Santo Entierro ni ser venerada en la casa de los feligreses.

En las calles del Grao, Canyamelar y Cabanyal lo normal en estas jornadas es escuchar saetas y piezas dedicadas a los Cristos, Nazarenos o Dolorosas, pero en las principales plazas de concentración de cofrades y hermanos ayer sólo hizo acto de presencia el silencio.

La única nota de imagen y sonido es la que se produjo en la noche del sábado y de ayer en la calle Escalante y Pintor Ferrandis, muy cerca de la sede musical de Unión de Pescadores (Casinet). Y es que un matrimonio, Alirio León Arévalo y Noelia Portero Miralles, consiguieron levantar la moral de los vecinos proyectando vídeos e imágenes acompañadas de sonido en la fachada de un edificio para recordar las procesiones de la Semana Santa Marinera de ediciones anteriores.

Lo que fue una ocurrencia del momento, se ha convertido en el mensaje de móvil sobre la Semana Santa Marinera que más ha pasado de cofrade a cofrade. «Tengo como afición una discomóvil y la tenía guardada. El otra día la recuperé y empecé a hacer pruebas con vídeos y fotos y lo proyecté sobre varias fachadas. Al final vi una finca que estaba en el cruce de Escalante con Pintor Ferrandis que está más a la vista del barrio, y todo el mundo se asomó al balcón para ver las imágenes y escuchar la música de marchas y saetas», indicó Alirio León.

Este vecino es venezolano, pero lleva 18 años viviendo en el Cabanyal, y su suegra es clavariesa del Cristo del Salvador. «Además, mi bisabuela, abuela y madre y más familiares hemos tenido en diversas ocasiones al Cristo del Salvador en casa y nuestra intención era recordar los festejos de otros años y se ha hecho viral», según la esposa, Noelia Portero.

Por otro lado, cabe destacar que el llamamiento que hizo el pregonero de la Semana Santa Marinera, el director del MuVIM Rafael Company, y la propia Junta Mayor que preside Pep Martorell para los vecinos sacaran a los balcones las colgaduras con imágenes o colchas artesanales está teniendo respuesta.

Calles como Escalante, Manuela Estellés, Pintor Ferrandis, Felipe Vives de Cañamás, Reina o la misma plaza de los Ángeles muestran las imágenes de Dolorosas, Ecce-Homo o del Cristo del Salvador, entre otros.

Uno de los vecinos que no ha dudado en sacar colgaduras e imágenes al balcón es Toni Carles. Su familia tuvo el pasado año la imagen del Ecce-Homo en casa. «Este año tenemos que estar todos sin salir de casa. Es lo que nos ha tocado vivir. En 2019 se suspendieron procesiones por la lluvia y ahora por el coronavirus. Hay que pensar que es una causa mayor y no podemos ser egoístas. Como cristianos hay que aceptarlo para que no se extienda el virus».

Enrique Juan también ha colgado en el balcón un cubre artesanal y la imagen del Ecce-Homo. «El Cabanyal está en silencio total y hemos decorado el balcón. En la iglesia de Los Ángeles se decorado la capilla con palmas y ramos de olivos».

El presidente de la Corporación de Granaderos del Cabanyal, Jorge Simó, detalla que también han engalanado más de 40 balcones. Además, han hecho una programación alternativa para cumplirla desde casa. «En el Domingo de Ramos, por ejemplo, pedimos a los compañeros que colgarán fotos en redes sociales de los hogares que han tenido a la Dolorosa. Para el Viernes Santo lanzamos la idea de que la gente suba fotos de la careta de los Granaderos o algún complemento que les suela acompañar».

En Oración en el Huerto, por ejemplo, «estamos recomendando estos días manualidades relacionadas con la Semana Santa a los niños como pintar la indumentaria de los vestas o el anda y hemos pedido que pongan colgaduras en el balcón con la copa y ramos de olivos alusivos al Huerto», indica Paco Amat, hermano mayor.

Sara Lorente, secretaria de la cofradía de Jesús de Medinaceli, explica que en su colectivo han propuesto la iniciativa de «hacer altares de oración con elementos varios como escapularios, capirotes, medallas de las cofradías o estampas». Y añade que «el Miércoles Santo es el día en que solemos hacer la procesión penitencial del silencio, pero como este año no puede ser, pedimos a los cofrades que ese día saquen al balcón un cirio o una vela».