Carmen Prades, fallera mayor de Valencia 2026: «Quiero ser accesible y que todos se lleven un guiño y mi abrazo»
Afirma que en la proclamación «me escucharán a mí, pero serán las voces también de las doce compañeras»
L. S.
Valencia
Martes, 14 de octubre 2025, 02:09
Carmen pasará a la historia por ser la tercera fallera mayor de Valencia que procede Convento Jerusalén, ya que en 1979 les representó Luz Fos ... y en 1994, Laura Segura.
Publicidad
Carmen reconoce que ha sido un año redondo «por los premios conseguidos y ahora con mi elección como máxima representante de las Fallas». Detalla que quiere que Valencia «se sienta orgullosa de mí y de mi corte. Que nos puedan conocer».
A la pregunta de por qué quiere que se le recuerde, responde: «Quiero ser una fallera mayor de Valencia accesible, que todo el mundo se lleve un gesto, un guiño, un abrazo». Este martes se dirigirá a los falleros y a los valencianos en la proclamación, pero asegura que «aunque me escuchen a mí por primera vez, serán las voces de las doce compañeras, porque hemos preparado el discurso juntas».
Noticia relacionada
Carmen Prades y Marta Mercader, reinas del centro para la fiesta eterna
Su padre, Carlos, su madre, también Carmen de nombre y su hermano mayor, Carlos, estaban felices. Su padre, empresario de la firma de transporte y logística Torres, que cuando ganaron el primer premio de Especial se lanzó de cabeza a un lago de la falla que representaba el oro líquido, bromeó ayer al decir que tocaba celebrarlo en la fuente de la plaza del Ayuntamiento, Su madre, que ha sido tres décadas directora de bancos, aseguró que se volcará por completo en el reinado de su hija y el hermano, que tiene una empresa de software y energía fotovoltáica afirmó que su hermana «tiene una gran templanza, mucha compostura y es muy trabajadora».
Publicidad
La protagonista aseguró que está convencida que el 13 es su número. «Salí en el preselección con el 13, el día del Roig Arena salí la última, en la posición 13, y la llamada ha sido el día 13». También explicó que el domingo fue a ver a la Mare de Déu «para darle las gracias de llegar hasta donde había llegado y haré hoy un hueco para visitarla».
Para un día tan importante como el de ayer escogió un traje azul marino confeccionado por Eduardo Cervera, que combinó con unos pendientes y zapatos en color nude. Como anécdota, llevaba un anillo que pertenece a su iaia Lola. «Este anillo me acompaña en los momentos importantes. Es una manera de tenerla cerca. «La echo de menos, igual que a mi tío Pedro Ródenas, que es el que me hizo enamorarme de las Fallas». Hoy lucirá el espolín creado para ella de nombre 'Libertad' y de color verde Convento.
Suscríbete a Las Provincias al mejor precio
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión