Lugares de Valencia que suman: «Frente a Airbnb, soberanía vecinal»
Las ciudades que conocían nuestros padres ya no existen, pero en Valencia hay quien no se rinde. Hablamos de varios espacios de resistencia vecinal
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as ciudades que conocían nuestros padres ya no existen. Mercerías, zapaterías, carnicerías, charcuterías, sastrerías y un sinfín más de «ías» se han convertido hoy en franquicias de yogur helado, apartamentos turísticos o negocios de alquiler de bicicletas. No todo es malo, pues el mundo global atesora diversidad de mejoras con respecto al pasado: estamos más y mejor conectados, nos transportamos más rápido de un sitio a otro y todo (o casi todo) está al alcance de nuestra mano.
Sin embargo, lo que sí está claro es que la autenticidad y la esencia de las ciudades cae en picado cuando la globalización despliega sus alas. Cada vez encontramos menos bajos comerciales con el encanto del pasado. Las calles se transforman en lugares de tránsito y dejan de ser espacios donde hacer comunidad.
Valencia no se conforma
Frente a la necesidad, virtud. En Valencia hay quien no se rinde. Personas que defienden proyectos que van mucho más allá de la rentabilidad económica, cuyos intereses no son mercantiles, sino humanos. Asociaciones, clubes, locales donde se desempeñan actividades sociales sin necesidad de formalizar nada… Estas iniciativas son el reducto de una tierra que tuvo una identidad y que la globalización y los intereses puramente económicos están destruyendo. Y demuestran una idea maravillosa: las personas, pase lo que pase, siguen luchando por ideas buenas, justas y humanas.
Pincha en cada uno de los proyectos para conocerlos a fondo.
Espai Solidaria, construir comunidad en Valencia y Benín
Las obras de la Calle Alicante de Valencia han impedido que Espai Solidaria sea un lugar tan conocido como debiera. A primera vista, es una vistosa tienda de ropa, pero en realidad es mucho más. Es un espacio de diálogo, de solidaridad, de moda circular y de construcción de comunidad a través de las economías transformadoras...
El Club de los libros libres: una segunda vida en comunidad para la literatura
En la Malvarrosa, concretamente en la Calle de la Font d'En Carrós, se encuentra el Club de los Libros Libres. Solo hace falta echar un vistazo desde fuera para darse cuenta de que allí dentro ocurre algo especial. Pilas y pilas de libros se amontonan unas encima de otras sin dejar espacio para ninguna otra cosa que no sea literatura. Aunque suene raro, todos esos libros no están en venta. Para quedarte con los que quieras, tan solo tienes que formar parte del club. Once euros al año es el importe simbólico que Rafael Soriano, fundador del club hace cinco años, estableció y no ha incrementado jamás, pese a la inflación, pese a la subida del alquiler, pese a todo.
Sankofa, comunidad y diálogo entre culturas en Patraix
En el barrio de Patraix se encuentra Sankofa, un pequeño y acogedor local que une el pasado con el presente de una forma bella: busca proteger la memoria de las calles de Patraix y, al mismo tiempo, integrar a diferentes culturas con la nuestra a través de la labor que desempeña. ¿Qué es lo que hacen allí? Actividades sociales, asambleas vecinales, talleres, cursos, presentaciones de libros, exposiciones artísticas e incluso conciertos. Sankofa es un lugar en el que, vayas cuando vayas, siempre habrá algo organizado...
Este reportaje ha sido realizado por LAS PROVINCIAS y Caixa Popular, la entidad cooperativa, valenciana, con valores sociales y solidarios. Una banca diferente que destaca por la gestión ética y profesional y por su solvencia. Una cooperativa que crece generando riqueza local, ocupaciones estables y con una sensibilidad social diferente a otras entidades. La principal entidad financiera valenciana se convierte en un ejemplo práctico de cómo la banca puede contribuir a una economía más justa y equitativa mediante los valores de la Economía Social.
