«Ha sido tan rápido que no sabemos qué van a cerrar, estamos todos a la expectativa»
Incredulidad y sorpresa en Benigànim por un confinamiento tan inmediato que desata muchas dudas entre los vecinos por las medidas
rocío escrihuela
Benigànim
Lunes, 31 de agosto 2020
Faltaban pocos minutos para las 12 del mediodía cuando los móviles de los vecinos de Benigànim recibían vía WhatsApp por el canal oficial del Ayuntamiento la noticia del confinamiento del municipio. A algunos les pilló de sorpresa, pero otros muchos ya sabían lo que les iba a deparar la tarde y los próximos 14 días porque los medios de comunicación ya habían adelantado la noticia.
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Los teléfonos echaban humo, pero nadie sabía realmente qué implicaba esa decisión tomada de manera urgente por la Conselleria de Sanidad. ¿Será cómo la otra vez? ¿Podré abrir la tienda? ¿Necesitaré un papel para poder ir a trabajar? Muchos interrogantes de los vecinos buscando respuesta. La decisión se convirtió en el tema de conversación de un municipio que lleva ya una semana con algunos locales cerrados por decisión de los propietarios tras el brote que afectó a 24 personas y que obligó el pasado lunes a realizar más de 180 pruebas PCR a los vecinos de una localidad de casi 6.000 habitantes.
Las principales dudas estaban entre los comerciantes que ayer habían levantado la persiana como cualquier otro día, pero qué no sabían si podrían hacerlo por la tarde. «Ha sido todo tan rápido qué no sabemos que van a cerrar, estamos todos a la expectativa», reconocía la propietaria de una zapatería, aunque a la vez apuntaba que «de las tiendas no han dicho nada, pero la otra vez cerramos dos meses». «Es un problemón cerrarlas», añadió
Mismo interrogante en una tienda de ropa de ceremonia donde la propietaria mostraba su preocupación porque tenía pedidos pendientes de recoger por clientes y «no sé si podrán venir a por ellos, o tendré que enviarlos yo», explicaba. Y es que tiene vestidos encargados para las comuniones que esta semana hay en la localidad vecina de L'Olleria. «No sé exactamente si podré abrir porque no soy de primera necesidad», agregó la mujer.
La duda también era el tema de discusión de un despacho de pan y cafetería situado frente a la tienda de ropa. «Nos hemos enterado ahora y he llamado a la Policía Local a ver si esto es cómo el confinamiento del principio o es diferente», se preguntaba la dueña, quien también se había enterado por el servicio de mensajería pero apuntaba que el Consistorio «no lo ha dicho por el bando».
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Todos marcaban las cuatro de la tarde como la hora que iba a dar el pistoletazo de salida para el confinamiento. «Supongo que el 'cafecito' se habrá acabado», lamentaba la dueña, que se resignaba a abrir sólo para la venta del pan en horario reducido de 8 a 13 horas.
Quienes tendrán que cerrar serán los bares y algunos vecinos apuraban ayer su última visita hasta dentro de 14 días. «Voy a tomarme la última al bar por si acaso», decía un vecino que apuntaba que la situación de ahora «no creo que sea como el principio», aunque protestó por la decisión. «No tienen ni idea, han decidido esto porque no saben qué hacer y aún no han dicho qué van a cerrar», añadió.
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Disparidad de opiniones sobre si la decisión de confinar el municipio es acertada o no. «Ha sido muy rápido, podrían haber avisado antes que es lunes y todos están trabajando, pero si es para bien», explicaba una pareja a la salida del supermercado. «La situación se ha complicado», añadía un hombre que paseaba con su hija de ocho años que «no sé si comprar los libros o un ordenador», por si las clases finalmente tendrán que ser on-line. La pequeña tenía «ganas de volver al colegio, pero ahora la cosa se está esparciendo por aquí», decía la niña.
Para otros la decisión que se ha tomado «era preciso porque la gente se estaba pasando, no se mantenían las distancias», apuntaba un vecina, que coincidía con la opinión de dos mujeres en una droguería. «Si es por el bien del pueblo, me parece bien, hay que poner los medios necesarios. Y si tenemos que cerrar las tiendas, pues lo que sea mejor», agregó.
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Mientras, en la plaza Mayor seguía la actividad en algunos bares y los vecinos esperaban su turno en una entidad bancaria. «Si es lo que nos toca lo tenemos que aceptar. Esperemos que sirva de enseñanza», afirmaba un hombre, mientras que madre e hija que venían de hacer la compra apuntaron que esta decisión «se veía venir», aunque recordaron que el municipio está estos días «más tranquilo» porque «algunos bares cerraron voluntariamente».
Las religiosas piden la intercesión de la beata Inés
Las religiosas Agustinas Descalzas del monasterio de Benigànim han asegurado que todos los días rezan para que acabe la pandemia y piden por todos los fallecidos y sus familias e imploran para ello «la intercesión protectora de la beata Inés», a quien los vecinos de la localidad confinada tienen mucha devoción. Josefa Teresa Albiñana Gomar, conocida como la beata Inés, fue la primera mujer valenciana declarada beata hace 130 años. En un comunicado Avan ha señalado que la comunidad de vida contemplativa del monasterio de la Purísima, San José y la Beata Inés, que está formada en la actualidad por nueve religiosas, pide « a Dios todos los días en las misas por el fin de la pandemia».
Los bares bajan las persianas, se suspende el inicio de curso y no hay bodas ni bautizos
Alrededor de las cinco y media de la tarde varias patrullas de la Guardia Civil tomaron posiciones en los accesos a la localidad de Benigànim. Comenzaba en ese momento el confinamiento que entró en vigor con la publicación ayer por la tarde en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) de la resolución de la Conselleria de Sanidad que acuerda las medidas excepcionales para los próximos 14 días.
Tras detectarse cerca de un centenar de casos positivos, las autoridades sanitarias han decidido restringir la entrada y salida del municipio aunque con algunas excepciones. Se podrá ir al médico, a trabajar, regresar al lugar de residencia habitual o salir para el cuidado de personas mayores, menores o dependientes, así como casos de fuerza mayor. La circulación por carretera y viales que transcurren o atraviesan el municipio está permitida, siempre y cuando tengan origen y destino fuera del mismo, especifica la resolución.
Además, el curso escolar no comenzará la semana que viene en Benigànim porque se suspende la actividad educativa presencial en todos los centros, incluidas las escuelas infantiles. Sanidad también ha acordado el cierre de centros sociales, casinos o clubes. A ellos se suman los centros de día para personas mayores y otros colectivos de carácter social, aunque algunos ya habían cerrado hace unos días cuando se comunicó el brote que afectaba a 24 personas.
También están obligados a bajar la persiana bares, restaurantes y otros establecimientos de ocio, salvo que presten servicio de comidas para llevar o a domicilio. Del mismo modo permanecerán cerrados gimnasios y centros deportivos de todo tipo, así como parques y jardines del municipio. Además, se ha decretado la supresión de espectáculos deportivos con público.
Los eventos sociales también se verán afectados. No podrán celebrarse bodas, bautizos o comuniones con personas invitadas. Los velatorios tendrán una limitación de 15 personas si son al aire libre, y de 10 en espacios cerrados, se trate o no de personas convivientes, matizan la resolución. La participación en la comitiva para el entierro o cremación se restringe a un máximo de 15 personas.
Por su parte, los comercios de la localidad, sean o no de primera necesidad, no se verán afectados, según lo publicado en el DOGV.
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