Sin inversiones en la costa valenciana ante el verano

Paseos por adecuar, espigones por construir, llevar arena a las playas que las arrastran, arreglo de los daños de los temporales... Estas son algunas de las deficiencias que arrastra el litoral valenciano cuando empieza una temporada turística vital por la crisis sanitaria.

Mientras las reivindicaciones se multiplican en diferentes municipios, la Dirección General de Sostenibilidad de las Costas y el Mar, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, no ha invertido un euro en el primer cuatrimestre del año en el litoral valenciano. Según un estudio de la Cámara de Contratistas de la Comunitat, este departamento no ha realizado ninguna licitación en la costa entre enero y abril de este año.

Durante ese periodo, Costas ha realizado licitaciones por valor de 48,5 millones de euros en otros lugares de España. Ninguna de estas actuaciones han sido para la mejora de las playas o el litoral valenciano.

El problema, según la Cámara de Contratistas, es que la situación se arrastra desde hace años. Si en 2019 no se adjudicó ni un euro en las costas valencianas, en 2020 se licitaron actuaciones por cerca de 14 millones.

En concreto, fueron la restauración y mejora ambiental de la costa entre el río Monegre y el Rincón de la Zobra, en El Campello, por valor de 858.150 euros; la estabilización del frente litoral de La Llosa y Almenara por un importe de 7,8 millones y la firma de un convenio con el Ayuntamiento de Altea para la regeneración del casco urbano (5,3 millones). Esta última no es estrictamente un proyecto para la mejora del entorno de la costa aunque corresponda a la dirección general.

También señalan desde la Cámara que a esta falta de licitaciones se une el que desde 2015 no ha habido año en el que el grado de ejecución de las inversiones haya superado el 50%.

Según los datos oficiales que maneja la Cámara,, en el año 2015 el grado de ejecución fue de un 14'3% y de un 59'8% en 2016. En el ejercicio siguiente tan sólo se gastó el 28'7% de la cantidad presupuestada. En 2018 fue el 36,5% y subió hasta el 51,5% en 2019 y el 50,2% en 2020.

Estos datos, según destacan desde la Cámara de Contratistas, evidencian la falta de inversión y el escaso interés del Ministerio en el litoral valenciano pese a la importancia que tiene para una comunidad como la valenciana. «Es incapaz de gastar lo presupuestado», indicaron.

Por otro lado, el presupuesto del Ministerio para la Transición Ecológica tan sólo ha incluido 5,4 millones de euros para actuaciones en la costa valenciana durante 2021.

Mientras, la costa necesita de inversiones. Las obras pendientes a lo largo de todo el litoral son numerosas. Es el caso del proyecto para la construcción de cinco espigones en Burriana con un presupuesto estimado de unos ocho millones de euros. Esta actuación permitirá recuperar las playas del municipio que también sufren la pérdida de arena. El proyecto para regenerar la playa de Almenara asciende a seis millones.

De mayor envergadura es el proyecto de regeneración de las playas de El Saler y la Garrofera, con una inversión de 28,5 millones que tiene por objetivo recuperar una parte del litoral de la ciudad de Valencia que ha sido fuertemente dañado por la erosión.

El Ministerio de Medio Ambiente elaboró en 2015 dos documentos -Estrategia de Actuación en la Costa Sur de Valencia y Estrategia de Actuación entre el Tramo de Costa entre el Puerto de Castellón y el Puerto de Sagunto- en el que proponían hasta 64 actuaciones diferentes para atajar los daños que causan los temporales de forma definitiva. Han pasado casi seis años desde entonces y poco más se ha sabido de la iniciativa que sigue sin ejecutarse. En Moncofa continúa pendiente un proyecto del ministerio valorado en cerca de cien millones.

A todo ello se suman la reparación de los daños de los temporales. Es el caso de Gloria en enero de 2020. Algunos municipios, como Peñíscola, han tenido que recurrir a las arcas municipales para hacer frente a los arreglos ante la pasividad del ministerio.